Texto y Foto: Redacción Cuba Noticias 360
Patricio Wood desapareció de la televisión cubana y, de repente, apareció en Madrid. En este viaje definitivo lo acompañaron su esposa y su hija. El actor, una de las grandes figuras del cine cubano, se ha establecido en la capital española con miras al futuro. Su traslado ha generado titulares en medios de comunicación independientes debido a la evidente relevancia del hecho.
Así, Wood se suma al numeroso grupo de artistas cubanos que han optado por dejar la isla en medio de la grave crisis económica para establecerse en otros países, principalmente en Estados Unidos o España. Previamente, su hijo, Gabriel Wood, realizó un viaje que comenzó en Nicaragua y culminó en Miami, donde reside actualmente.
El legendario actor cubano, de 65 años, no ha confirmado aún ningún nuevo proyecto, aunque esto no significa que no tenga planes en mente. El protagonista de El brigadista está dando forma a varias propuestas para el próximo año en colaboración con otros realizadores cubanos, de acuerdo con información obtenida por Cuba Noticias 360.
Desde su salida de Cuba, el artista ha atravesado un complejo proceso de adaptación a un nuevo entorno, en el que ha encontrado un considerable apoyo en la calidez de la comunidad cubana en la capital española. Se ha relacionado con pintores, cineastas, escritores y youtubers, participando en diversas celebraciones donde, al igual que en Cuba, sus admiradores le han demostrado su afecto habitual.
Estar radicado en Madrid no implica que se desvincule de su labor en la isla. Varios actores que residen fuera de Cuba han regresado para participar en diferentes producciones o para presentar películas en las que han trabajado. Un caso reciente es el de Yadier Fernández, quien asistió al Festival de Cine de La Habana para el estreno de Baracoa, dirigida por el cineasta cubano Luis Ernesto Doñas, residente en Italia.
Es probable que pronto surja la noticia de un nuevo proyecto cinematográfico de Wood en España, ya que su talento ha superado las fronteras de la isla y sus seguidores seguramente lo extrañan en nuevas películas o dramatizados.
Lo cierto es que el actor no temió a la reinvención y, al igual que cualquiera de sus personajes, ha sabido adaptarse a las exigencias de su nuevo entorno para continuar con la vida que ha elegido para él y, sobre todo, para su familia, mientras su obra sigue testificando su gran contribución al cine cubano y ese talento que lo llevó a ocupar un lugar destacado en la cultura cubana, esa que sigue representando desde el otro lado del océano.



