Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Martiño Ramos Soto, un docente gallego y exlíder de la coalición de izquierda En Marea, fue condenado en España a 13 años de prisión por haber violado de manera reiterada a una alumna de 12 años. Recientemente, se le identificó en Cuba, donde supuestamente residió durante varios meses. Este hombre ha estado prófugo de la justicia española desde julio, momento en el que se hizo pública la sentencia firme del Tribunal Supremo, según diferentes medios de comunicación españoles.
El diario El Español informa que el profesor arribó a La Habana utilizando una identidad falsa, presentándose como “Martín Soto”. Durante su estancia, se dedicó a la fotografía, participando en talleres, exposiciones y otras actividades culturales sin que nadie pudiera reconocer su verdadera identidad.
Según el mismo medio, Ramos Soto actuaba con cautela, incluso en restaurantes y negocios privados, sin suscitar sospechas sobre su pasado ni sobre la condena que lo perseguía.
El País menciona que el profesor creó un perfil en Instagram bajo el nombre “Martín Soto” 12 días antes de que la sentencia se convirtiera en firme. La cuenta presenta su rostro de manera clara y contiene numerosas imágenes relacionadas con proyectos fotográficos, desfiles y sesiones con modelos. Después de su identificación, empezaron a surgir comentarios en esa cuenta que alertaban sobre su verdadera identidad y la condena judicial en España.
Ramos Soto, que actualmente tiene 50 años, estuvo en libertad durante todo el proceso judicial, a pesar de la gravedad de los hechos y las dos sentencias anteriores de la Audiencia Provincial de Ourense y del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que lo encontraban culpable de violaciones “sádicas y reiteradas” contra la menor.
La víctima fue abusada durante cuatro años, desde los 12 años, y reportó los hechos a los 16, lo que llevó a la investigación que finalizó con la condena definitiva del Tribunal Supremo.
Cuando la Policía española intentó arrestarlo tras la sentencia firme, Ramos Soto ya había desaparecido. Según El País, las autoridades españolas comenzaron a seguir pistas sobre su locación en La Habana.
Por su parte, Europa Press indica que la Audiencia Provincial de Ourense emitió un auto solicitando su extradición desde Cuba el 31 de octubre, después de confirmar indicios de que el profesor se encontraba en la isla.
Aunque su paradero actual sigue siendo incierto, diversos medios y usuarios en redes sociales han señalado que el profesor dejó de contestar su teléfono cubano y abandonó la residencia donde vivía, aparentemente después de enterarse de que había sido identificado.
Como señala El Español, la ausencia de un tratado de extradición vigente entre España y Cuba complica su regreso, aunque desde España aseguran que “siguen trabajando para que esta persona cumpla definitivamente su condena” en su país. Hasta el momento, las autoridades cubanas no han emitido declaraciones sobre la información divulgada por la prensa española ni sobre la orden de extradición en su contra.
