Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Expertos cubanos han anunciado el lanzamiento de un nuevo repelente natural, producido a partir de Caña Santa, en un contexto donde el país enfrenta brotes masivos de dengue y chikungunya desde hace varias semanas.
De acuerdo a un informe del telecentro provincial de Granma en su cuenta de Facebook, la elaboración del repelente es responsabilidad de la Empresa Laboratorio Farmacéutico Medilip, en colaboración con la Empresa de Farmacia y Ópticas de la región.
El medio estatal comunicó que “ha comenzado la producción de repelentes para mosquitos y jejenes, con el propósito de salvaguardar a la población y respaldar las acciones de control vectorial”. Según el comunicado, el producto combina tintura de Neem con Caña Santa y se presenta como una opción “100% natural”, aunque se restringe su uso en niños menores de tres años.
Las imágenes compartidas en Facebook indican precios de 200 CUP por litro, y presentaciones más pequeñas a 40 CUP, en un país donde los salarios aún no alcanzan para cubrir las necesidades básicas de la población.
Este anuncio se produce en un momento en que el Ministerio de Salud Pública se enfrenta a críticas crecientes por la falta de una estrategia efectiva contra las arbovirosis. El director nacional de Epidemiología, Francisco Durán García, admitió recientemente que “más del 30 %” de los cubanos ha contraído dengue o chikungunya.
Aunque el especialista desmintió el rumor de que el 90 % de la población se habría enfermado, evitó proporcionar cifras exactas o un desglose por tipo de enfermedad, enfatizando que el país enfrenta “un complejo escenario epidemiológico debido a la circulación de arbovirosis como el dengue y el chikungunya”.
Las autoridades cubanas afirman que hay “una tendencia a la disminución”, pero los datos presentados por el propio MINSAP sugieren lo contrario. Durán confirmó la transmisión de dengue en 14 provincias, siendo más severa en La Habana, Matanzas y Ciego de Ávila, y también reportó chikungunya en 14 territorios, donde el 98,5 % de los casos se concentra en Matanzas, La Habana, Camagüey, Cienfuegos, Artemisa y Villa Clara. Matanzas ha sido catalogada como la provincia “más complicada”.
En la práctica, el discurso de control contrasta con la realidad de que los virus se han propagado casi por todo el país, afectando a cerca de un tercio de la población. Ante este panorama, el nuevo repelente se presenta como una solución emergente que intenta mitigar una crisis que ha estado afectando a los cubanos durante meses y que, según la opinión de especialistas y ciudadanos, requiere más que soluciones improvisadas para frenar su avance.



