FotoCollage: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Un operativo policial en Holguín resultó en la detención de tres hombres que transportaban más de 35 kilogramos (kg) de cocaína ocultos dentro de un compresor industrial, según confirmaron fuentes del Ministerio del Interior (MININT).
La captura se llevó a cabo en Camazán, municipio de Báguanos, en la carretera que conduce a Mayarí, cuando agentes de la Policía Nacional Revolucionaria interceptaron un vehículo en el que los sospechosos trasladaban el equipo modificado.
Según la información publicada en el perfil de Facebook ‘El Cubano Fiel’, el compresor había sido cuidadosamente manipulado: “abrieron el tanque, introdujeron los paquetes, y luego lo sellaron y pintaron para que pareciera de fábrica”, señala la nota.
En redes sociales han circulado imágenes de los tres aprehendidos, esposados y con el rostro cubierto por emojis, así como fotografías del compresor y los bloques de droga encontrados en su interior.
Aunque no se han revelado sus identidades, la publicación destacó que el procedimiento policial se realizó con tal precisión que sugiere que las autoridades contaban con información previa sobre el cargamento y su método de ocultamiento.
Este incidente subraya la creatividad y audacia de los narcotraficantes en su intento por introducir estupefacientes en Cuba. En los últimos años, se han identificado métodos que incluyen el uso de envases de productos de higiene, alimentos e incluso artículos religiosos para camuflar cocaína y marihuana.
Las autoridades están preocupadas por este fenómeno. A pesar de la política de “tolerancia cero” contra las drogas, las cifras siguen en aumento. Solo este año, el MININT reportó la detención de más de 1,500 personas en operativos antidrogas, de las cuales muchas permanecen en prisión preventiva.
La venta y el consumo de drogas sintéticas también han generado alarmas. En agosto, el Tribunal Supremo Popular advirtió sobre el aumento de los cannabinoides conocidos como “químico” o “papelillo”, especialmente en La Habana, y aprobó una ley que endurece los castigos para quienes posean o comercialicen estas sustancias.
Paralelamente, las sanciones judiciales se han multiplicado. La semana pasada, el Tribunal Provincial de Holguín impuso penas de entre seis y ocho años de cárcel a tres individuos -dos hombres y una mujer- por delitos relacionados con el tráfico y consumo de drogas. En La Habana, un tribunal condenó a 15 años de prisión a otro cubano acusado de comercializar cocaína y estupefacientes sintéticos.
A pesar de estas medidas, el crecimiento del mercado clandestino de drogas en Cuba, en medio de una crisis económica que afecta la vida cotidiana en la Isla, se ha convertido en una de las principales preocupaciones sociales de los cubanos.