Texto: Hugo León
Foto: Archivo CN360
La cuenta oficial de YouTube del presidente venezolano Nicolás Maduro se volvió inaccesible este sábado, un hecho que fue reportado por el canal estatal Telesur mediante un mensaje en X, donde afirmaron que la plataforma había “eliminado” el perfil la noche anterior sin proporcionar explicaciones.
Google, la empresa matriz de YouTube, no ha respondido a las solicitudes de comentarios sobre la suspensión de la cuenta, que ocurre en un contexto de crecientes tensiones entre Caracas y Washington tras el despliegue de buques de guerra y aviones estadounidenses en el sur del Caribe.
Antes de esta medida, el canal de Maduro contaba con más de 200 mil seguidores y se utilizaba frecuentemente para publicar los discursos del presidente venezolano, así como fragmentos de su programa semanal en la televisión estatal de Venezuela.
De acuerdo con sus propias políticas, YouTube puede cerrar cuentas que acumulen infracciones a las normas comunitarias, tales como la difusión de desinformación, incitación al odio o contenido que pueda afectar procesos democráticos. Sin embargo, dado que no se han proporcionado detalles o comentarios sobre esta medida, no es claro si la eliminación de la cuenta se debe a tales comportamientos.
Mientras tanto, la tensión con Maduro ha aumentado en los últimos meses como no lo había hecho durante su extenso mandato.
En primer lugar, Maduro ha enfrentado repetidas acusaciones de fraude electoral en los comicios presidenciales del año pasado, donde, según las actas recopiladas por activistas opositores, habría sido ampliamente derrotado. Sin embargo, la entidad electoral venezolana, controlada por el propio Gobierno, nunca publicó los resultados que respaldaran la victoria atribuido al mandatario.
Por otro lado, un tribunal federal en Nueva York tiene cargos pendientes contra él por conspiración para traficar cocaína hacia Estados Unidos, y recientemente, el Departamento de Estado aumentó a 50 millones de dólares la recompensa por su captura.
Además, EE. UU. ha movilizado varios buques de guerra hacia las aguas del Caribe, cerca de la costa venezolana, afirmando que se trata de una operación antidrogas. No obstante, el Gobierno de Caracas considera la presencia militar como una amenaza directa a la soberanía nacional y parte de un plan para forzar la caída de Maduro.