Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Este fin de semana nos regalo un momento que nos reconcilia con lo verdaderamente esencial: la familia. En la arena de Punta Cana, República Dominicana, se reunieron tres generaciones de un clan emblemático del arte cubano: Coralita Veloz, Tahimí Alvariño y María Karla Rivero.
Después de meses de separación, madre, hijas y nietos se encontraron en un hotel frente al mar para recuperar el tiempo perdido. Tahimí, que aún reside en Cuba, llegó con sus hijos, mientras que Coralita y María Karla viajaron desde Miami acompañadas de otros familiares y amigos.
El reencuentro fue inmortalizado en un video compartido en redes sociales. Posteriormente, aparecieron otras publicaciones que rápidamente cautivaron a miles de seguidores.
Los comentarios no se hicieron esperar, llenos de elogios por la unión familiar y la complicidad de generaciones de mujeres que han dejado huella en el panorama artístico cubano. Como han defendido las artistas, los mejores días son “rodeaos de la familia y buenos amigos”.
Más que una simple reunión, este gesto se transforma en un recuerdo que, sin duda, permanecerá en los corazones de tantos cubanos que, a pesar de la distancia, mantienen viva la esperanza de volver a encontrarse.
“La felicidad de estar juntos”, así describió el perfil de ‘La casa de Maka’ en Facebook estos momentos que aún disfrutan en Punta Cana. Además, en una publicación reciente mantuvieron actualizados a sus seguidores a través de una transmisión en vivo porque “hoy es día de celebración” y querían compartir “todo lo que estamos viviendo en familia y con amigos”.
