Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Fede Gayardo
Los datos recientemente publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) revelan que “la población cubana envejece, decrece y se urbaniza”. Al final de 2024, la edad promedio de los habitantes alcanzó los 42.1 años, con una proporción de sexos de 970 hombres por cada mil mujeres y tres de cada cuatro cubanos (75.1%) viviendo en zonas urbanas.
Un informe difundido por el medio estatal Cubadebate destaca que, aunque en 2016 el país alcanzó un récord histórico con 11 239 224 residentes, para 2024 esta cifra se redujo a 9 748 007 personas. Entre 2020 y 2024, el éxodo y la disminución de la natalidad causaron una pérdida de 1.4 millones de ciudadanos, según la ONEI.
Por provincias, Camagüey, Cienfuegos y La Habana lideran la caída poblacional, con descensos de 39.5, 39.1 y 35.4 por cada mil habitantes, respectivamente. El municipio de Antilla, en Holguín, fue la única excepción, mostrando un ligero aumento de 0.8 habitantes por cada mil.
Este retroceso demográfico se explica, en parte, porque las defunciones (128 098 en 2024) superaron ampliamente a los nacimientos (71 358), lo que resultó en una tasa de crecimiento natural negativa, sostenida desde 2020.
La mortalidad alcanzó 12.9 por mil habitantes, y por cuarto año consecutivo no se llegó a la barrera de los 100 000 nacimientos: hubo 19 034 menos que en 2023. Con una tasa global de fecundidad de apenas 1.29 hijos por mujer —la más baja registrada—, Cuba está muy por debajo del nivel de reemplazo poblacional, que se sitúa alrededor de 2.1 descendientes por mujer, un indicador que no se supera desde 1978, cuando la tasa fue de 1.87.
El medio mencionado insiste en que estas cifras son influenciadas por decisiones personales marcadas por aspiraciones profesionales, dificultades económicas, problemas para acceder a vivienda y la responsabilidad de cuidar a familiares ancianos.
En lo que respecta al saldo migratorio externo, se informa que “en 2024 fue de -251 221 personas, una cifra significativa, aunque la más baja desde el año 2022”.
Este conjunto de factores —baja fecundidad, migración continua y alta expectativa de vida— impulsa el envejecimiento del país. En 2024, hubo 710 personas en edad inactiva por cada mil en edad laboral, una proporción similar a la de las décadas de 1970 o 1980, aunque ahora se trata mayormente de jubilados, lo que exige cuidados, servicios de salud específicos y pensiones.
En febrero de este año, la ONEI informó que la población efectiva en Cuba era de poco más de 9 millones 700 mil personas, cifra que representa una disminución de aproximadamente 335 mil ciudadanos en comparación con los datos de cierre de 2023.
Se considera población efectiva a toda persona que, en un año calendario, nació en el país o en el extranjero pero reside de manera permanente en la Isla, acumulando 180 días o más de residencia en los últimos 365 días y no ha fallecido.
La actualización de este dato se compartió en una reunión para analizar la dinámica demográfica, presidida por el Primer Ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, según lo reportó en sus redes sociales el periodista de la televisión cubana Lázaro Manuel Alonso.
Según Juan Carlos Alfonso Fraga, vicejefe de la ONEI, a finales de 2023 Cuba contaba con una población efectiva de 10 millones 55 mil 968 habitantes, lo que representa una disminución del 10,1 % en comparación con el año 2020.