Foto: Archivo CN360 (imagen referencial)
Un nuevo parque fotovoltaico, situado en el municipio camagüeyano de Vertientes, se conectará al Sistema Electroenergético Nacional en los próximos días, generando 21,8 megawatts durante el horario pico de máxima exposición solar.
Una vez que se complete la instalación de todos los paneles, será el primero de tres proyectos de este tipo que se espera conectar pronto en esta extensa provincia del centro oriente del país. Según un informe de la Agencia Cubana de Noticias, los otros dos se encuentran en construcción en Florida y en el municipio cabecera.
Cada uno de estos proyectos contribuirá con la misma cantidad de energía al SEN, al igual que otros ya instalados en diferentes regiones del país. En el caso del parque Luaces en Vertientes, cuenta con siete contenedores tecnológicos de 3,125 megawatts cada uno, así como 42,588 paneles de 560 megawatts cada uno y 1,638 mesas.
Las brigadas que están trabajando en la puesta en marcha ponen especial énfasis en la fundición de las aceras en todos los contenedores tecnológicos, así como en la construcción de cimientos resistentes a huracanes, para evitar pérdidas de recursos ante la frecuente ocurrencia de estos fenómenos meteorológicos.
El primer parque de este tipo instalado exclusivamente en Cuba se encuentra en La Habana, donde se sincronizó al SEN a finales de febrero pasado con una generación máxima de 21,8 megawatts. Según medios estatales, cada parque cuenta con una garantía de los fabricantes chinos que supera los 10 años para los inversores y más de 20 para los paneles.
El gobierno cubano ha planeado la instalación de 92 parques hasta 2028, que aportarán más de 2000 megawatts de potencia, con el objetivo de aliviar la crisis de generación distribuida, provocada por la falta de combustible y por las constantes averías y mantenimientos de las termoeléctricas.
Para este año, de acuerdo con la prensa estatal, se espera que se completen los primeros 55 parques de 21,8 megawatts, asegurando así que “muchos territorios contarán con una buena parte de la energía en determinados horarios del día, lo que tendrá un impacto social significativo”.
No obstante, el gran inconveniente de esta tecnología es que solo opera con la luz del sol, alcanzando su máxima capacidad durante las horas de mayor insolación. Por las noches, cuando se requiere más electricidad para las familias, su funcionamiento cesa.
Aun así, las autoridades buscan ahorrar combustible durante el día gracias a la energía generada por estos parques, con el fin de utilizarlo para la generación nocturna a través de las termoeléctricas. Según expertos, estas iniciativas son vistas como un parche para la grave situación de la infraestructura electroenergética de la isla, considerada una de las más obsoletas de América Latina.