Foto: Alejandro Martínez Vélez / EUROPA PRESS
El grupo liberal en el Parlamento Europeo ha solicitado este jueves al Alto Representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Josep Borrell, que actúe como observador en las manifestaciones programadas en Cuba para el 15 de noviembre, las cuales han sido prohibidas por el gobierno de Miguel Díaz-Canel.
Un informe de EuroPress indica que, mediante una carta, el líder de los liberales, Stéphane Séjourne, propuso que miembros de la delegación de la UE en la isla sean enviados a diferentes puntos de Cuba para presenciar las marchas previstas, ante el temor de que La Habana «responda violentamente a las protestas».
Los parlamentarios europeos consideran que esta presencia es parte del apoyo a la sociedad civil cubana, uno de los aspectos contemplados en el acuerdo de cooperación que une a Bruselas con La Habana.
Además, destacan la «extrema importancia» de que la UE actúe como observador imparcial de lo que pudiera ocurrir durante la jornada de manifestaciones, las cuales han sido rechazadas por las autoridades cubanas, quienes argumentan que los organizadores tienen vínculos con Estados Unidos y «pretenden promover un cambio de sistema político en Cuba».
Por otro lado, los organizadores de las protestas en la isla han afirmado que, a pesar de la prohibición del gobierno cubano, continuarán con su iniciativa de manifestarse el próximo 15 de noviembre.
Recientemente, la Fiscalía cubana ha convocado a varios de los organizadores de la marcha cívica para notificarles que, si se presentan en las calles en la fecha señalada (15N), incurrirán en delitos de desobediencia, manifestación ilícita e instigación a delinquir, y serán severamente juzgados.