Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
La Gaceta Oficial de la República de Cuba ha divulgado hoy su Edición Ordinaria No. 90 correspondiente al 25 de agosto de 2022, donde se incluye la Ley 149 de Protección de Datos Personales, aprobada por el Parlamento cubano en mayo pasado.
Dicha Ley tiene como objetivo asegurar que las personas mantengan el control sobre sus datos. También busca prevenir cualquier intrusión en la transmisión de sus derechos personales, sean estos íntimos o no, con fines distintos a los permitidos por la ley vigente.
Esta normativa regula el uso de los datos personales, así como la voz, la imagen, la identidad, el honor y la intimidad de cualquier persona, ya sea natural o jurídica, incluyendo también a los medios de comunicación masiva.
Asimismo, establece los principios y garantías fundamentales para la protección del titular de la información personal.
El texto indica que el uso y tratamiento de estos datos, en concordancia con la legislación vigente, está alineado con el mandato constitucional de establecer un conjunto de derechos y garantías frente a terceros, permitiendo limitar solicitudes, prohibir acceso, y uso indebido de la información personal.
También se menciona la importancia de obtener el consentimiento para tales acciones y se reafirma la obligación de informar a las personas sobre aspectos relevantes que les conciernen.
Según una comunicación del Ministerio de Justicia (Minjus) publicada hoy, la nueva normativa brinda seguridad a las personas sobre la gestión de sus datos almacenados en registros, archivos, bases de datos e información pública, así como la posibilidad de solicitar su modificación y obtener la corrección, rectificación, actualización o cancelación correspondiente.
El Minjus ha destacado en su publicación que esta norma es esencial, evidenciando su utilidad en un contexto de intercambio de información personal y la certeza de que estos datos pueden identificar a una persona, ya sea de manera directa o indirecta, especialmente en un entorno de avances tecnológicos y digitales.
