Foto: RRSS
En el marco de las diversas iniciativas que están implementando las autoridades cubanas para reactivar el turismo, una de las más recientes es el buceo con tiburones toro. Esta actividad ya había comenzado antes de la pandemia del COVID-19, pero actualmente se busca revitalizarla y relanzarla en el mercado internacional.
El punto ideal para disfrutar de esta atractiva oferta turística es la Playa de Santa Lucía en Camagüey, específicamente en el Centro Internacional de Buceo Sharks Friends. Este centro es uno de los pocos en el mundo donde los buceadores tienen la oportunidad de nadar con tiburones toro.
La experiencia se presenta en paquetes turísticos que también incluyen los populares paseos en carros clásicos. “Gente de todo el mundo viaja a Cuba para nadar con tiburones”, comentó a CNN Dan Whittle, director senior del Environmental Defense Fund, una ONG que en 2015 colaboró con el gobierno cubano, científicos locales y pesquerías para implementar mayores protecciones para la vida marina en la isla.
Esta alternativa turística está ganando terreno en la región caribeña. Según un estudio publicado en Biological Conservation en 2014, los buceadores que visitaron las Bahamas para interactuar con tiburones contribuyeron con más de 100 millones de dólares a la economía local de ese país.
En Cuba, la iniciativa es aún modesta, pero se espera que los arrecifes vírgenes de la isla, junto con el aumento de los esfuerzos para proteger aproximadamente 100 especies de tiburones nativos, atraigan a los visitantes que han demorado su regreso desde la pandemia.
Para ello, los especialistas marinos están trabajando en la concienciación de la población, explicando que los tiburones pueden ofrecer un beneficio económico significativo a la comunidad. “Les decimos a los residentes que no los maten, que no los pesquen. Siempre estamos en esa labor”, comenta el guía de buceo Lázaro Suarez Zayas a la cadena televisiva. “El tiburón toro no está en peligro de extinción, pero es nativo de esta zona, y lo utilizamos como recurso natural, así que debemos protegerlo”, argumenta.