Foto: Kako Escalona
El gobierno mexicano ha anunciado una notable disminución en las detenciones de migrantes provenientes de Cuba, Haití, Venezuela y Nicaragua en la frontera con Estados Unidos. Las cifras sugieren que el plan acordado con el presidente Joe Biden ha tenido un impacto positivo para su administración.
Según un informe citado por el periódico El País, la Cancillería mexicana califica como un éxito el acuerdo con Biden que otorga 30,000 visas para estos países. Sin embargo, los expertos advierten sobre el aumento de otros flujos migratorios irregulares y el colapso del sistema de acogida.
El informe señala una reducción del 97,5% en la detención de nacionales cubanos y menciona un “flujo cercano a cero de personas haitianas”. Estas cifras provienen del flujo migratorio del mes de enero de 2023, tras un alarmante aumento en diciembre que hizo sonar las alarmas entre las autoridades fronterizas. En el último mes del año pasado, los agentes fronterizos detuvieron a 251,487 personas, lo que equivale a más de 8,000 detenciones diarias.
De acuerdo con datos publicados por el servicio de inmigración de Estados Unidos, durante enero, se aprobaron 26,000 entradas para venezolanos, 4,800 para cubanos, 2,000 para haitianos y 800 para nicaragüenses por vía aérea.
A pesar de esta disminución, la nueva ley estadounidense y los compromisos asumidos por el gobierno mexicano tendrán repercusiones en el sistema de asilo en México. Al cierre de enero, la Comar alcanzó un nuevo récord de peticiones: más de 12,800 solicitantes. En el mismo mes del año anterior, la cifra era de menos de la mitad: 5,800.
“El promedio mensual del año pasado fue de 1,429; es decir, este mes estamos casi tres veces por encima, lo que nos coloca en los niveles de 2021, cuando se registraron 50,000 haitianos solicitando refugio”, explica a EL PAÍS Andrés Rodríguez, titular de la Comar.
En 2022, hubo cerca de 120,000 solicitantes, sumándose a los 130,000 del año anterior. “Los migrantes ven nuestro sistema de asilo como un trampolín para ahorrar y solicitar estas visas especiales. Debemos proteger a las personas, pero también nuestro sistema de asilo, sin convertirnos en una especie de agencia de viajes. Estamos al borde del colapso”, opina el funcionario.