El Ministerio de Turismo de Cuba (MINTUR) emitió un comunicado oficial asegurando que el rapero estadounidense Tekashi 6ix9ine, quien se encuentra de visita en la isla, no lanzó dólares en las afueras del Hotel Packard. Además, alegaron que los hechos atribuidos al artista perseguían «claros fines de provocación».
Un post en el perfil oficial de Facebook del organismo destaca que: «Dos personas ajenas al cantante, una de ellas fingiendo ser él de forma irrespetuosa y con claros fines de provocación, lanzaron billetes hacia la población. El MINTUR confirma que los hechos ocurridos no están vinculados con el artista urbano Tekashi 6ix9ine. En estos momentos, el cantante continúa su visita privada en el país».
Tras conocer la llegada del artista a Cuba, varios fanáticos se acercaron este jueves al hotel Packard, donde se hospeda, con el objetivo de verlo y tomarse fotos.
En medio de todo esto, el público reunido afuera del inmueble fue testigo de una «lluvia de dólares» lanzada por dos individuos cubanos que simulaban ser el visitante estadounidense, según la entidad.
Por su parte, la prensa estatal y las cuentas de redes sociales asociadas al estado cubano calificaron el acto como una «provocación» y un «bochorno».
Resulta llamativa la «equivocación» del periodista cubano Randy Alonso, director de la Mesa Redonda y del medio estatal Cubadebate, quien firmó el texto «No es tiempo para marines», en el cual no solo lo llamó «susodicho» en tono despectivo y/o irónico, sino que alegó no gustarle su música ni su proyección, e incluso comparó los hechos y a su supuesto protagonista con los marines que profanaron la estatua de José Martí.
No obstante, dejando espacio para las dudas, Randy acotó: «Y si lo hizo otro tampoco es admisible». Por lo tanto, es de esperar duras sanciones para los jóvenes a los que se les atribuyan finalmente estos sucesos que han acaparado todas las miradas de la isla. Varios usuarios en redes han afirmado que se trata de un joven residente en Estados Unidos acompañado de un amigo que sí vive actualmente en la isla, quienes crearon ese complejo escenario para grabar un video; sin embargo, aún no hay confirmación oficial.
Esta situación ha llevado a que el Paseo del Prado habanero fuera acordonado por el aparato policial, desplegando sus fuerzas en un intento de impedir que se repita el hecho.
