Foto: Archivo | CN360
Tres individuos están siendo investigados por el Órgano de Investigación Criminal del Ministerio del Interior (Minint) en Sancti Spíritus por los delitos de estafa y falsificación de monedas, utilizando un audaz modus operandi, según reportes de la prensa local.
El esquema comenzaba con anuncios clasificados en Revolico, donde un matrimonio ofrecía la venta de dólares estadounidenses (USD) proporcionados por un tercer implicado.
La estafa se extendía a un perfil falso creado en Facebook con esos fines, aunque en algunas ocasiones también utilizaban un número telefónico para ganar la confianza de las víctimas, que frecuentemente solicitaban garantías sobre la procedencia de los billetes.
Lo más sorprendente del caso es la forma natural en que la mujer, cuyo nombre no ha sido revelado, se presentaba en persona en las casas o puntos de encuentro acordados con los compradores, sin ocultar su rostro y a menudo vistiendo una bata de médico, como si todo fuera legítimo.
A veces llegaba en motorina y otras en un carro alquilado; sin embargo, siempre lograba convencer a los compradores de divisas, quienes, por exceso de confianza o falta de conocimiento, no verificaban los billetes de 100 USD y, como resultado, no se daban cuenta de que todos tenían la misma numeración: ME42703207A.
Con este mismo método, lograron estafar a cuatro personas, y la mujer fue arrestada in fraganti durante el quinto caso, según la Jefatura del Órgano de Investigación Criminal del Minint en Sancti Spíritus.
Los implicados vendieron en promedio a cada una de las víctimas entre 800 y 1,500 dólares falsos, a precios que variaban entre 160 y 170 pesos en moneda nacional por dólar, dependiendo de las fluctuaciones del mercado informal.
Las ganancias rondaban los 160,000 pesos por cada venta, monto que se repartían entre los tres detenidos, quienes ahora enfrentan medidas cautelares por el delito de falsificación de monedas, contemplado y sancionado en el Código Penal.
No obstante, según reporta la prensa local, los especialistas continúan investigando para establecer la responsabilidad penal de cada uno de los imputados en las estafas, así como la posible participación de otros involucrados en un caso en el que aún no están del todo claras las circunstancias de la cadena delictiva. De hecho, los expertos han publicado direcciones y teléfonos para que aquellos con información relevante puedan ponerse en contacto.
La compra y venta de dólares por métodos ilegales ha sido un negocio lucrativo que, a pesar de las medidas implementadas por el gobierno cubano, ha seguido generando un mercado negro en el que, si bien muchas personas resuelven sus necesidades, también han proliferado el robo, la estafa y hasta el asalto a mano armada en diversas áreas del país.