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La escena se repite cada lunes en la noche, después del noticiero: la familia cubana reunida alrededor del televisor, esperando que Pánfilo y sus vecinos estrenen una nueva temporada de «Vivir del Cuento», el programa más popular de la última década. Sin embargo, cada lunes deben conformarse con un capítulo en retransmisión.
La situación genera preocupación y los comentarios van en aumento, tanto en la cola de la gasolina como en las redes sociales: ¿por qué no hay nuevos episodios de «Vivir del Cuento»? ¿Por qué nadie explica las razones de esta notable ausencia para los cubanos?
“El problema con «Vivir del cuento» no es solo que no se estén estrenando nuevos episodios, sino que parece haber una prohibición de reponer excelentes viejos episodios con personajes entrañables como Facundo y Ruperto”, publicó recientemente en su blog y en su cuenta de Facebook Roberto M. Yepe, desiéndose como analista político y traductor freelance.
“Me temo que podría estar en marcha la estrategia de repetir una y otra vez los mismos pocos episodios hasta lograr que la audiencia se sature, creando así mejores condiciones para posiblemente reemplazar el programa por, tal vez, una tercera emisión semanal de ‘Con Filo’ —alertó Yepe con cierta ironía—. Los cubanos ya estamos perdiendo, en la práctica, los productos normados de la libreta, tan consistentemente defendida por Pánfilo. Sería el colmo que, además, perdiéramos el espacio para defenderla con una sonrisa”.
La incertidumbre proviene del mismo equipo realizador del espacio, ya que no se emiten declaraciones sobre el estado actual de la nueva temporada, ni los actores revelan detalles en sus redes que sugieran ensayos, grabaciones o posproducción.
De hecho, los más mediáticos como Luis Silva, quien interpreta a Pánfilo, y Marlon Pijuán, Isidoro, han estado publicando desde hace semanas videos cortos sobre asuntos de actualidad, sketches elementales y promoción a sus actividades personales, pero sin hacer referencia al proyecto que los une: «Vivir del Cuento».
En las plataformas virtuales, las opiniones abarcan un amplio espectro que varía desde la falta de combustible y recursos que podrían estar afectando las gestiones, hasta la inconformidad de los censores con los guiones que abordan la precariedad de la vida, situación a la que Pánfilo y sus amigos siempre han enfrentado con un humor mordaz.
Algunos televidentes han llegado incluso a enviar cartas al departamento de atención a la población del ICRT en busca de explicaciones sobre esta omisión llamativa.
“¿Se están produciendo nuevos episodios del programa ‘Vivir del cuento’? —pregunta Roberto M. Yepe— ¿En caso afirmativo, existe alguna previsión sobre su fecha de estreno? ¿Por qué solo se están reponiendo los mismos pocos capítulos estrenados recientemente? ¿No es posible reponer episodios de años anteriores? ¿Hay alguna prohibición respecto a la reposición de episodios con los personajes de Facundo y Ruperto?”.
Acostumbrados a que en la casa de Pánfilo se aborden de manera descarnada y sarcástica las preocupaciones más acuciantes del cubano, ya hay quienes hacen apuestas sobre los temas que podría incluir —si finalmente se transmiten— la próxima temporada: el atraso y disminución de los productos de la libreta, las colas de la gasolina y hasta la suspensión del 1 de Mayo y el posterior diluvio de memes.
