Foto: Oscar González Puentes | Shutterstock
Edmundo González Urrutia, un destacado opositor venezolano, ha sido ingresado en un hospital público de Madrid tras sufrir un episodio súbito de baja tensión este domingo.
El diplomático de 75 años afirmó en sus redes sociales que su estado de salud es estable y que está recibiendo una atención “adecuada” por parte del personal médico en España, donde reside como exiliado político desde septiembre de 2024.
La hospitalización del líder opositor se produce en un momento crítico para la política venezolana, caracterizado por el rechazo del gobierno de Nicolás Maduro a los resultados electorales y por la fragmentación interna de la oposición.
Según fuentes de la Plataforma Unitaria Democrática citadas por El Mundo, González Urrutia deberá permanecer en el hospital al menos 48 horas.
“Agradezco la excelente atención recibida. Estoy consciente de que mi responsabilidad ante el país requiere una pronta recuperación”, manifestó González. En su comunicado, también reafirmó que la dirigente María Corina Machado sigue liderando el proceso de transición política, en medio de los preparativos de la oposición legítima frente a las elecciones convocadas por el oficialismo sin garantías para finales de este mes.
Detrás del aparente reposo del líder opositor, se oculta una situación familiar igualmente dramática. Su esposa, Mercedes López, lo acompaña en el exilio, pero la familia enfrenta además la desaparición forzada de su cuñado, Rafael Tudares, quien fue secuestrado por fuerzas chavistas hace cuatro meses al llevar a sus hijos al colegio. Desde entonces, su ubicación es desconocida.
“Su detención es arbitraria. Rafael está siendo sometido a una de las peores formas de tortura: la desaparición. Su familia también sufre esta situación”, denunció Mariana González de Tudares, esposa del detenido. La mujer ha recorrido prisiones, centros de detención y hospitales en el país sin obtener información oficial. Asegura que no hay expediente judicial abierto y que el silencio de las autoridades confirma que se trata de una detención política.
Mientras se recupera en su habitación del hospital, Edmundo González continúa ejerciendo su función política con cautela. El apoyo de líderes opositores como Machado ha sido evidente. “Querido Edmundo, nuestro admirado presidente electo, sé que te recuperarás y seguirás luchando por nuestra libertad”, escribió la dirigente. La salud del líder y el destino de su familia están entrelazados con el pulso que sigue definiendo el futuro político de Venezuela.
