Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
Por segunda ocasión en menos de un mes, la Embajada de Estados Unidos en La Habana tuvo que suspender sus servicios y atención presencial debido a problemas relacionados con el suministro eléctrico.
El puesto diplomático permanecerá cerrado al menos durante toda la jornada del miércoles 2 de agosto.
“Importante: debido a un fallo eléctrico, algunos servicios se suspenderán el miércoles 2 de agosto, incluyendo los servicios consulares de visas”, comunicó la embajada a través de su perfil en la red social Twitter.
El mensaje aclara que el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) continuará brindando sus servicios y que los solicitantes del Programa de Reunificación Cubano “deben asistir a sus citas según lo programado”.
A pesar de que la publicación indica que las afectaciones son solo para este miércoles, termina señalando que se informará al público sobre cuándo se normalizarán los servicios.
Por lo tanto, no está claro si la situación con el suministro eléctrico se extenderá por más tiempo.
📣 Importante: Debido a un fallo eléctrico, algunos servicios serán suspendidos el miércoles 2 de agosto, incluyendo los servicios consulares de visas. Las personas afectadas recibirán información por correo electrónico.
USCIS seguirá proveyendo servicios durante el próximo… pic.twitter.com/36lqccv7r9
— Embajada de los Estados Unidos en Cuba (@USEmbCuba) August 1, 2023
A mediados de julio, la misma embajada había suspendido sus servicios también por una falla eléctrica en su sede, manteniéndose cerrada al menos por dos días.
Los funcionarios estadounidenses en La Habana no han proporcionado detalles sobre las averías que afectan al puesto diplomático ni si están relacionadas con la crisis energética cubana o con problemas inherentes a la instalación, que ha estado en uso durante varias décadas.
La Embajada de Estados Unidos en La Habana está enfrentando un proceso de restauración que tiene un costo estimado de unos 28 millones de dólares, anunciado desde 2022 y que se espera concluir a principios de 2024.
El puesto diplomático había estado en un estado de visible deterioro tras permanecer casi cinco años cerrado por mandato del expresidente Donald Trump, bajo la justificación del llamado “Síndrome de La Habana”.