Foto: Alfredo Alonso
El autor Pablo Armando Fernández, una de las figuras más destacadas de la literatura cubana, falleció este jueves en La Habana a los 91 años.
Nacido el 2 de marzo de 1930 en la actual provincia de Las Tunas, cultivó una vasta obra literaria caracterizada por su vocación humanista y su notable sensibilidad poética. Entre sus títulos más destacados se encuentran Los niños se despiden, premio Casa de las Américas 1968; Libro de los Héroes, Golpe de dados, El vientre del pez, Toda la poesía y Salterio y lamentación.
Pablo Armando residió en Estados Unidos desde 1943 hasta 1959, donde cursó estudios en la Washington Irving High School y en la Columbia University, ambas en Nueva York.
Al regresar a Cuba, desarrolló una importante labor intelectual en la influyente publicación Lunes de Revolución, donde trabajó como subdirector hasta que fue clausurada por la ortodoxia política de la revolución.
Además, fue consejero cultural de la embajada de Cuba en Gran Bretaña; secretario de redacción de la revista Casa de las Américas; miembro del Consejo Editorial de la Academia de Ciencias de Cuba; secretario del centro cubano del PEN Club Internacional; director de la Revista Unión de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y director del Fondo Editorial de Casa de las Américas.
Con una obra traducida a varios idiomas, representó a la isla en eventos internacionales de gran relevancia, como las Bienales de Poesía en Bélgica, el Encuentro de Poetas de Spoleto y el Congreso de Poetas de Edimburgo, entre otros.
En 1966 formó parte del jurado de los Premios Casa de las Américas y en 1992 integró el jurado del prestigioso Premio Cervantes.
En 1996, el Ministerio de Cultura de Cuba le otorgó el Premio Nacional de Literatura y en 2003 se le dedicó la Feria del Libro, el evento literario más importante del país.