Foto: RL Hevia
La central Guiteras tardará 17 días en reincorporarse al Sistema Eléctrico Nacional tras su salida de servicio en la madrugada del 29 de febrero, «‘de manera controlada» con el fin de llevar a cabo un mantenimiento «impostergable», según lo comunica la Unión Eléctrica.
Esta salida planificada se lleva a cabo debido a que se dispone de combustible en las Patanas Flotantes, el Emplazamiento de Mariel y el Emplazamiento de Moa, lo que garantiza una potencia superior a la actual de la CTE Guiteras.
Durante el tiempo que la central esté fuera de operación, se estima que la afectación en la máxima demanda oscile entre 950 MW y 1000 MW, siempre que se mantengan las condiciones previstas.
El director técnico de la UNE comentó que se llevará a cabo un trabajo en la caldera de la termoeléctrica Antonio Guiteras, planificación que se había programado desde hace tiempo.
“Hemos mencionado anteriormente que hemos enfrentado una gran indisponibilidad de combustible en las centrales flotantes y en los emplazamientos de Mariel y Moa. Sin embargo, hoy está llegando el combustible a la termoeléctrica desde el desplazamiento de Mariel y a las centrales flotantes del Mariel. Esperamos también recibir combustible en las centrales flotantes de La Habana el viernes”, indicó.
En este sentido, se iniciará el arranque del emplazamiento de Moa, que había estado fuera de servicio, alrededor del mediodía de hoy.
“Habrá afectaciones al servicio, pero no se aumentarán debido a la salida de la termoeléctrica Antonio Guiteras, siempre y cuando las condiciones se mantengan en el resto de las centrales. Realizamos la planificación considerando las unidades que están fuera por mantenimiento”, añadió.
A través de redes sociales, se han compartido una serie de medidas restrictivas de ahorro en centros laborales y de producción como consecuencia de la salida de esta central, considerada el mayor bloque energético de Cuba.
