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Son cada vez más los lugares que los cubanos han tenido que guardar en su memoria. Los «Di tú», los «Rapiditos» y los «Pío Pío» son parte del recuerdo de quienes residen en la isla, así como de aquellos que viven en el exterior.
Los «Pío Pío» nacieron en los años 70 como una cadena de comida rápida, especializada en pollo en diversas formas: pollo frito, mollejas, sopa, croquetas y pollo empanado, siempre acompañados de papas fritas. Gran parte de su popularidad se atribuía a sus precios accesibles y al delicioso sabor de su comida.
En algunos rincones de La Habana aún subsisten vestigios de lo que fueron estos restaurantes. Muchos de estos locales, hoy deteriorados, evocan tiempos mejores que los cubanos recuerdan en las redes sociales. Se menciona el «Pío Pío» de Guanabacoa, Playa, Cojímar y El Vedado. Algunos comentan que uno de estos establecimientos ofrecía la singularidad de permitir el consumo desde los automóviles. Con el tiempo, pasaron de ser una cadena de comida a convertirse en un símbolo de nostalgia.
En sus inicios, los precios iban desde 2 pesos por una ración de pollo hasta 50 centavos por un consomé. “Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde… eran lugares muy económicos y el pollo más sabroso y sencillo que podías degustar, acompañado de cervezas mientras continuabas bailando”, señala un usuario en Facebook. “Qué tristeza. Salí de Cuba en el 80 con 16 años. Era de La Habana Vieja. Había un Pío Pío justo frente a donde se montaba la lanchita de Casablanca, frente al castillito por el malecón. Siempre iba con mi mamá. Las papitas estaban deliciosas y el pollo también”, así recuerdan su experiencia varios cubanos. Muchos también lo veían como una opción para llevar, “si no tenías ganas de cocinar, ibas, comprabas y luego en casa disfrutabas de un banquete”.
En 2017, la Agencia Cubana de Noticias anunció la reapertura del Pío Pío ubicado en L entre 15 y 17, en El Vedado, después de 25 años de clausura y un notable deterioro constructivo. No obstante, este renacer no perduró mucho; hoy solo queda el nombre y las ruinas de estos locales tan queridos por los cubanos.


