Foto: US Chess Federation
El Gran Maestro cubano Leinier Domínguez volvió a poner de manifiesto su pertenencia a la élite del ajedrez al concluir invicto y posicionarse en la quinta plaza del Campeonato Mundial de Ajedrez Rápido que se celebró en Doha, Qatar, hasta este domingo.
Conocido como “El Ídolo de Güines”, un apodo que lleva desde su juventud, Leinier completó las 13 rondas, distribuidas en tres días, sin perder ninguna partida. Este desempeño le permitió acumular 9,5 puntos y mantenerse en la parte alta de la clasificación general del torneo.
Según los informes oficiales de la Federación Internacional de Ajedrez, el rendimiento del ajedrecista, residente en Estados Unidos desde hace casi diez años, reafirma su estatus dentro del ranking mundial de partidas rápidas, donde ocupa el puesto 14 con un ELO de 2703, cifra que aumentará en 2.5 puntos tras esta actuación.
El comienzo del torneo mostró a Leinier con un ritmo competitivo constante, logrando dos victorias y tres empates, destacando especialmente una partida de tablas de gran significado simbólico frente al joven prodigio argentino Faustino Oro, quien el próximo enero podría convertirse en el Gran Maestro más joven de la historia.
Durante la segunda jornada, el cubano mantuvo su nivel de precisión estratégica, sumando otros dos triunfos y dos empates que lo afianzaron entre los contendientes a los puestos de honor en una tabla extremadamente reñida.
En la jornada final, Leinier demostró nuevamente su capacidad para manejar la presión, cerrando con un balance similar y obteniendo una prestigiosa victoria frente al turco Yguiz Erdogmus, quien llegaba con opciones reales de podio pero terminó en el puesto 15 del resultado final.
En términos generales, Domínguez destacó en seis partidas y acordó empates en las restantes, un balance que confirma su vigencia competitiva y refuerza la percepción de que su nivel en ajedrez rápido está de nuevo alineado con la élite mundial.
Este quinto lugar representa apenas un escalón por debajo del resultado obtenido en la edición anterior disputada en Nueva York, donde también finalizó invicto, una consistencia que pocos jugadores pueden exhibir en campeonatos de tal paridad.
El torneo de Doha estuvo marcado por la victoria del noruego Magnus Carlsen, quien regresó al trono del ajedrez rápido tras un año de controversias, demostrando nuevamente una fortaleza mental excepcional.
El actual campeón superó una derrota crucial frente al ruso Vladislav Artemiev en la séptima ronda y encadenó cinco victorias consecutivas, asegurando el título con unas tablas finales frente al neerlandés Anish Giri.
Con este triunfo, el noruego logró su sexto título mundial en la modalidad rápida y elevó a 19 su cosecha de campeonatos universales, cifra que podría aumentar en la modalidad Blitz que comienza este lunes en el mismo escenario.
En esta variante de ajedrez rápido, Leinier Domínguez enfrentará un nuevo desafío inmediato, buscando repetir su mejor resultado histórico cuando se consagró campeón mundial en 2008.



