Foto: Archivo CN360
El Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) ha confirmado la presencia del virus de la influenza H1N1 en el país, tras analizar más de mil muestras entre julio y noviembre. Según los resultados divulgados por medios oficiales, este subtipo de influenza se encuentra entre los principales virus respiratorios activos en la isla, junto al virus sincitial respiratorio (VSR) y el SARS-CoV-2.
Según el informe, se procesaron 1,423 muestras de diversas provincias, lo que permitió identificar patrones de circulación que sugieren un aumento en la actividad viral típico de la temporada invernal.
Las autoridades sanitarias han advertido que, debido a factores climáticos y a la movilidad de la población, se prevé un aumento en los casos respiratorios en las próximas semanas, especialmente entre niños, ancianos y personas con enfermedades crónicas.
La confirmación del H1N1 ocurre en un contexto ya complicado para la salud pública cubana. Además de los virus respiratorios, el país enfrenta un repunte en las arbovirosis, con decenas de muertes por dengue y chikungunya reportadas en lo que va del año. Esta situación aumenta la presión sobre un sistema de salud que ya enfrenta problemas de infraestructura, escasez de insumos médicos y alta demanda en los centros asistenciales.
Si bien las autoridades han confirmado la circulación del H1N1, no se han proporcionado cifras específicas sobre hospitalizaciones o muertes asociadas a este tipo de influenza. El MINSAP se ha limitado a recomendar medidas generales de prevención, como el uso de mascarillas en lugares con alta concentración de personas, la higiene de manos y la atención temprana a síntomas respiratorios.
Los especialistas recuerdan que el virus H1N1, responsable de la pandemia de 2009, continúa circulando de manera estacional en varios países y a menudo aparece en combinación con otros virus respiratorios, lo que puede complicar el diagnóstico clínico. En Cuba, la coexistencia del H1N1, las arbovirosis y el COVID-19 requiere reforzar los sistemas de vigilancia en laboratorios y unidades de salud, especialmente en un momento de mayor movilidad interna debido al cierre del año.
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