Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
Minutos después de que se confirmara oficialmente el inicio del juicio oral contra Alejandro Gil Fernández, exministro de Economía y Planificación de Cuba, su hija Laura María Gil decidió romper el silencio con un mensaje contundente: afirma que su padre es víctima de una “total manipulación” y que el proceso judicial se basa en una “tergiversación de la realidad”.
La joven reaccionó al enterarse de que el juicio comenzará hoy martes 11 de noviembre y será transmitido por la televisión estatal, según relató en una grabación que presuntamente envió a su tía María Victoria Gil y que fue difundida por el perfil de Facebook ‘El mundo de Darwin’.
“Sé que no es espía. Muchos pueden dudarlo, pero estoy segura de lo que digo. Nadie me hará cambiar de opinión”, declaró con determinación.
Laura María también denunció restricciones en sus mensajes de WhatsApp, lo que, según explicó, limita su capacidad para comunicarse y defender públicamente a su padre. Sin embargo, aseguró que no se dejará intimidar.
“Haré todo lo posible por estar allí, pero si no se puede, me enteraré de la sentencia. Lo que sé es que, pase lo que pase, mi padre no es espía”, subrayó.
El proceso judicial contra Gil Fernández ha generado un gran interés tanto dentro como fuera de la Isla, dado el perfil del acusado y la naturaleza de los cargos: espionaje y corrupción, delitos que en Cuba a menudo se manejan con total opacidad.
De acuerdo con informes de medios estatales, el juicio se llevará a cabo a puertas cerradas, sin la presencia de prensa ni observadores independientes, lo que incrementa las dudas sobre su transparencia.
“Este juicio es una total manipulación. Estoy segura de que él no es espía y si alguna vez se demuestra lo contrario, que lo digan con pruebas”, agregó Laura María en su mensaje, reiterando su compromiso de seguir exigiendo justicia.
No es la primera vez que la joven se manifiesta públicamente. En un comunicado previo en Facebook, había solicitado que el proceso fuera público y televisado: “Me uno a la solicitud popular de que haya un juicio a puertas abiertas, donde participe todo el que desee, y que sea transmitido en vivo por la televisión cubana y por Cubavisión Internacional… y no solo yo, Alejandro Gil también está exigiéndolo, no desde hoy, sino desde el primer día”.
Aunque las autoridades cubanas no han ofrecido declaraciones oficiales sobre el desarrollo del juicio, las palabras de Laura María Gil no solo cuestionan la legitimidad del proceso judicial, sino que también abren un nuevo capítulo en el caso más mediático del gobierno cubano en los últimos años.



