Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
El liniero Osmani Hernández Madroza, de 35 años, sufrió lesiones graves mientras trabajaba en reparaciones de una línea primaria de la Empresa Eléctrica de La Habana, ubicada en el municipio San Miguel del Padrón. Este incidente tuvo lugar el 12 de septiembre, poco después del mediodía, cuando el empleado intentaba reparar un “conductor partido”.
Como resultado del accidente, sufrió quemaduras severas en ambos brazos, por lo que fue trasladado de urgencia al hospital Miguel Enríquez, donde permanece bajo cuidados especializados.
Desde el centro médico, Hernández envió una nota de voz a su madre y posteriormente a otros familiares, donde mostró una sorprendente calma al reconocer la gravedad de sus lesiones.
“Tengo fuerza de voluntad… y soy consciente de lo que está por venir. Así que tranquila mamá, no te preocupes. Sé que probablemente pierda los brazos, pero la vida la conservo”, comentó el trabajador de la UNE, según una publicación en el perfil de Facebook ‘La Tijera’.
El audio, que circuló en el ámbito familiar, rápidamente se convirtió en un testimonio de su fortaleza ante la adversidad. En mensajes posteriores, agradeció el apoyo de compañeros, amigos y de quienes han estado pendientes de su recuperación.
Según declaraciones de su hermano y otros familiares, no se han organizado campañas de recaudación ni se han publicado cuentas bancarias. La única acción de este tipo fue impulsada independientemente por Gretel Aparicio, ex pareja del liniero y madre de su hijo, sin haber consultado previamente a Hernández ni a sus familiares más cercanos.
Por el momento, los insumos más necesarios para su tratamiento son gasas, medicamentos y materiales de cura, los cuales están siendo gestionados directamente por sus amigos y allegados, de acuerdo con fuentes cercanas.
La Empresa Eléctrica de La Habana, por su parte, emitió un comunicado afirmando que su empleado “se recupera favorablemente”, mantiene un “buen estado de ánimo” y cuenta con “todo lo necesario”. El parte oficial destacó el acompañamiento de directivos de la empresa, la atención médica recibida y las visitas de representantes institucionales.
No obstante, este relato no coincide del todo con lo que indica su entorno inmediato. Varios medios han recogido las palabras de su ex pareja, quien ha apelado a la solidaridad ciudadana para obtener materiales básicos de cura y afrontar necesidades que han surgido a raíz del accidente, lo cual contrasta con la narrativa de total atención que ofrece la empresa estatal.
