FotoCollage: RRSS
Texto: Fede Gayardo
La Policía Nacional de España detuvo en el distrito de San Blas, España, a un hombre y a una mujer acusados de haber introducido fragmentos de vidrio en la comida de un bebé, hijo de un cubano y una argentina.
Según informó el diario ABC, los padres fueron identificados como Yoelsis, de 34 años, y Claudia, de 33. Fue la madre quien, al darle de comer a su hijo de tan solo 10 meses, se percató de que en el interior del pomo había algo mezclado con el puré.
Ambas familias compartían el mismo apartamento, ya que los padres del pequeño alquilaban una habitación. Fuentes policiales señalaron que ya se habían registrado altercados previos entre los inquilinos.
La Jefatura Superior de Policía de Madrid indicó que los detenidos presuntamente habían introducido pequeños fragmentos de vidrio en el pomo de alimentación infantil que se encontraba en el refrigerador de la casa.
Los hechos ocurrieron el pasado 30 de agosto, cuando la madre, al servir el contenido en un plato, observó que junto al puré había cristales que podrían provenir de una botella. Avisó a la Policía, que envió una patrulla. Tras comprobar lo denunciado, los dos compañeros de piso fueron arrestados y puestos a disposición judicial.
A pesar de que los detenidos ofrecieron otra versión de los hechos, ese mismo día el juzgado de guardia decidió dejarlos en libertad. Ambas parejas regresaron al domicilio, pero el caso tomó un giro inesperado tras las declaraciones de los ahora detenidos, cuestionando la versión inicial de los padres.
Yoelsis relató al programa Mañaneros 360 que “mi señora se va a la cocina filmando con el teléfono, ya que ha habido más agresiones, para sacar la comida al niño. Entonces, introduce una cuchara para vaciar un poco la comida y vio algo gelatinoso. Cuando volvió a meter la cuchara, notó un objeto duro. Lo sacó a un plato y había un pedazo grande de vidrio”.
Por su parte, Claudia, la madre, también declaró que no se trata de inventos: “Tengo denuncias previas a lo ocurrido con el potito. De Elena entrando a la cocina mientras yo cocinaba con mi bebé en brazos, diciéndome que el llanto de mi bebé le daba ganas de tirármelo por la ventana. Además, nos entraron a robar a la habitación cuando no estábamos”.
William, uno de los presuntos culpables, expresó que él y su pareja no estaban en el piso cuando sucedieron los hechos. “Nosotros estábamos en la piscina desde las 11:00. Cuando nos llama la policía, eran las 16:00. Me presenté en la comisaría. Si analizan el vídeo, notarán claramente cómo ella se va grabando desde el principio. Eso es lo que vio la policía. Por eso no nos pueden culpar de nada. Nos dejaron en libertad, sin cargos, sin fianza, y no les otorgaron la orden de escarmiento que solicitaron”, afirmó.
Acerca de la convivencia, William mencionó que comenzó “a pedirles la habitación a ellos debido a los enfrentamientos que tenían. Se pelean y se agreden constantemente. He recibido muchas quejas de los vecinos”.
En respuesta a las acusaciones de robo, negó que hubieran entrado en la habitación ajena y aseguró que su puerta tiene cierre con llave. La investigación ha pasado por la comisaría y el juzgado de guardia, y por ahora, las versiones siguen en conflicto.