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Texto: Fede Gayardo
Justin Timberlake ha impactado al mundo del pop al revelar que ha estado luchando contra la enfermedad de Lyme en los últimos meses.
En una publicación de Instagram, el artista de 44 años admitió que el diagnóstico fue un verdadero golpe, aunque también explicó su bajo rendimiento en la etapa final de su Forget Tomorrow World Tour, que concluyó el 30 de julio en Estambul.
“Como muchos saben, soy una persona bastante reservada. Pero al reflexionar sobre la gira y los festivales, quiero compartir un poco sobre mi situación. He estado lidiando con algunos problemas de salud y me diagnosticaron la enfermedad de Lyme. No lo digo para que sientan lástima, sino para dar a conocer lo que he estado enfrentando tras bambalinas. Si han pasado por esta enfermedad o conocen a alguien que lo haya hecho, sabrán que vivir con ella puede ser extremadamente debilitante, tanto mental como físicamente”, escribió el ex integrante de NSYNC.
Según Timberlake, vivir con Lyme puede ser “implacablemente debilitante” en todos los aspectos. Además, comentó que, tras recibir el diagnóstico, empezó a entender por qué sufría de intenso dolor neuropático en el escenario y experimentaba gran fatiga. A pesar de todo, decidió seguir adelante porque “la alegría de interpretar en vivo” hacía que el malestar valiera la pena.
Lejos de ocultar su batalla, Justin ha optado por ser completamente honesto para evitar malentendidos y, al mismo tiempo, visibilizar una condición que a menudo queda en el olvido. Con este gesto, se une a otros famosos como Justin Bieber, Bella Hadid y Avril Lavigne, quienes también han hecho un llamado para normalizar la conversación sobre esta enfermedad.
A pesar de que enfrentar una enfermedad crónica puede afectar la autoestima, Timberlake mantiene una visión optimista. Sus palabras invitan a mirar hacia el futuro, y confiesa que no sabe “qué será de mí en el escenario”, pero destaca que cada nota interpretada bajo presión ha sido un regalo inolvidable. Al reconocer su diagnóstico, abre las puertas a un nuevo capítulo donde prioriza su arte y su salud.
La enfermedad de Lyme es una infección provocada por bacterias del género Borrelia, transmitidas al ser humano a través de picaduras de garrapatas infectadas. Sus primeros síntomas suelen ser similares a los de la gripe: fiebre, escalofríos, dolores musculares y articulares, dolores de cabeza y, en algunos casos, una erupción característica en forma de “ojo de buey”.
Si no se trata a tiempo con antibióticos, puede dar lugar a complicaciones neurológicas, cardíacas y articulares. En algunos casos, tras el tratamiento, los síntomas como fatiga y dolores crónicos pueden persistir, lo que se conoce como Síndrome de Lyme Post-Tratamiento. La clave para una recuperación completa es la detección temprana y la intervención médica adecuada.
