Foto: Archivo CN360
La Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (ETECSA) ha comunicado el inicio de la primera fase de un plan de contingencia para asegurar la continuidad de sus servicios durante los apagones que afectan actualmente la cotidianidad del país, especialmente en la provincia de Pinar del Río.
En particular, se han instalado 32 bancos de baterías en centrales telefónicas y radiobases, actuando como un pulmón artificial capaz de mantener operativo el sistema entre cuatro y seis horas cuando la red eléctrica se interrumpe.
Viñales, Consolación del Sur, Los Palacios, Minas de Matahambre y varios consejos populares —como Herradura y Sumidero— se encuentran entre los beneficiarios, aunque la mayor concentración de equipamiento se ha destinado a la cabecera provincial, que es un nodo central del occidente.
Actualmente, Pinar del Río cuenta con más de 390,000 líneas móviles activas; la red 2G abarca el 97% del territorio, la 3G llega al 70% y la 4G apenas alcanza la mitad, cifras que subrayan la urgencia de proteger la infraestructura ante los cortes eléctricos prolongados.
Hasta el momento, la falta de respaldo energético dejaba inoperantes las antenas y centrales apenas unos minutos después de cada apagón, lo que multiplicaba las llamadas fallidas, los mensajes retrasados y la frustración de los usuarios. Con las nuevas baterías, ETECSA espera mitigar ese “apagón digital”.
“Ubicamos los equipos en las áreas con mayor densidad poblacional e instalaciones clave para la cobertura móvil”, comentó Manuel Milián, director general de la empresa en Vueltabajo, al detallar que cada sitio fue evaluado en función de la frecuencia y duración de los cortes.
Queda por ver si el programa se extenderá a otras partes del país; por ahora, la experiencia en Pinar del Río servirá como termómetro mientras la población anhela algo fundamental: que la próxima vez que se corte la luz, al menos el teléfono no se desconecte de Internet automáticamente.