Foto: Archivo CN360
Un ciudadano cubano, conocido como C.R.L., será enviado de regreso a México tras pasar más de tres años en prison en Estados Unidos por fraude bancario y lavado de dinero. La causa: Cuba se niega a aceptarlo.
De acuerdo con la cadena WRBL, afiliada a CBS en Georgia, el hombre fue liberado del sistema penitenciario federal, pero se encontró en un limbo legal con una orden final de deportación y sin ningún país que lo quisiera de vuelta. Permaneció meses bajo custodia migratoria hasta que México accedió a recibirlo como parte de acuerdos migratorios regionales.
El hombre intentó salir del centro de detención apelando al hábeas corpus, pero un juez federal desestimó su solicitud este lunes. El fallo deja claro que la Corte no tiene autoridad para detener su deportación ni para decidir a qué país será enviado.
El juez Clay Land, encargado del caso, describió la situación como una “salida de Alicia en el País de las Maravillas” y subrayó la paradoja del sistema. “Una persona entra ilegalmente, comete delitos, su país no lo quiere de vuelta, y luego se queja cuando otro país acepta recibirlo”, expresó el magistrado.
Este caso revela la creciente tendencia del gobierno cubano a rechazar a sus nacionales con antecedentes criminales, incluso si han estado años en EE.UU.
La abogada de inmigración Rosaly Chaviano afirmó que este patrón se repite, con la isla priorizando a migrantes más jóvenes y recién llegados, según declaraciones recogidas por el sitio web Ciber Cuba.
Además, el mencionado medio indica que la situación pone de manifiesto una contradicción por parte de las autoridades migratorias de la isla. En marzo, el viceministro Carlos Fernández de Cossío declaró en televisión nacional que Cuba estaba dispuesta a aceptar deportados desde EE.UU. siempre que se respetaran los acuerdos bilaterales.
No obstante, casos como este y el del reguetonero Chocolate MC, quien tiene una orden de deportación desde 2022, cuentan una historia diferente.