Foto: Bebeshito / Instagram
Después de los diversos incidentes ocurridos en su reciente concierto en Houston, el cantante cubano Oniel Bebeshito ha decidido establecer un protocolo de conducta para sus próximos shows, dejando claro que no habrá tolerancia ante la indisciplina.
El artista comunicó esto a través de sus redes sociales: quien perturbe el orden será expulsado. “La gente tiene que entender que hay niños presentes, esto no es una discoteca, es un evento familiar”, destacó el cantante en sus historias de Instagram.
En este contexto, explicó que aquellos que causen problemas serán expulsados de inmediato, y se aplicará una multa de 1500 dólares al local que permita su ingreso en el futuro, además de un veto permanente para futuros conciertos.
Estas acciones se implementan tras la pelea viral que se suscitó a la salida de su espectáculo celebrado el pasado sábado en el NRG Arena de Houston. A pesar de que el popular artista reunió a más de ocho mil personas, lo que debía ser una celebración musical se vio empañado por gritos, empujones y objetos arrojados desde las gradas.
El primer lugar donde se aplicará el nuevo reglamento será en el Kaseya Center de Miami, donde el intérprete de “Tacto que llegó el reparto” se presentará el 9 de agosto.
Este concierto, anunciado a principios de año, es uno de los más anticipados por sus seguidores del sur de Florida, y promete ser un barómetro no solo de su popularidad, sino también de su capacidad para gestionar el ambiente en sus presentaciones.
Bebeshito, cuyo nombre real es Oniel Gómez, se ha consolidado como una figura emergente en el género urbano dentro de la escena cubana y la diáspora latina. Su música, que combina reguetón, trap y elementos del reparto, ha resonado con un público joven tanto en Cuba como en Estados Unidos.
Con millones de reproducciones en plataformas digitales y una presencia activa en redes sociales, el cantante ha construido una sólida base de fans que lo sigue con lealtad en cada ciudad. Ahora, busca fortalecer esa relación con un compromiso claro: seguridad, respeto y cero tolerancia a la violencia.
“Quiero que la gente venga a disfrutar, en paz. Y si tienes un problema, lo resuelves fuera del show”, sentenció el artista. La cita en la casa de los Miami Heat será su segunda gran presentación en esa ciudad, luego de su histórico debut a finales de diciembre, donde más de 20 mil personas llenaron las gradas del Pitbull Stadium.