Foto: Jorge Luis Borges
Texto: Karla Castillo
«¿Y qué pasa con las personas que residen en zonas donde no hay tiendas MLC? Por ejemplo, Arroyo Naranjo, ¿qué hacemos? ¿Acaso no podemos comprar en otro municipio?», es uno de los comentarios que acompaña la publicación del periódico Tribuna de La Habana, donde se explica que a partir del 10 de febrero, la ciudad retoma la municipalización del comercio.
«¿Y cómo se obtendrá el permiso? La última vez fue un verdadero fiasco, considerando que a muchos nunca se nos entregó», «¡Qué mala noticia! ¡Los que no viven en Playa están muy perjudicados!», son otras opiniones que se pueden leer, reflejando la percepción del público habanero sobre la decisión del Gobierno.
La medida fue anunciada en la reunión diaria del Consejo de Defensa Provincial (CDP) de La Habana, y estipula que las compras solo podrán realizarse en las tiendas del municipio de residencia, similar a lo implementado en septiembre de 2020, lo que ha generado preocupación entre muchos.
Esta disposición se mantendrá vigente hasta que el CDP lo decida, y su objetivo es frenar la propagación del SARS-CoV-2 en la capital, que continúa liderando la lista de contagios. Ya se han adoptado otras medidas como la restricción de movimiento de las nueve de la noche a las cinco de la mañana, limitaciones en el número de pasajeros en el transporte, horarios específicos para el traslado y la promoción del trabajo a distancia.
La reimplementación de la municipalización del comercio se basa en experiencias anteriores donde las personas debían mostrar su carnet de identidad o un permiso en caso de residir en un municipio diferente al del documento.
Se aplicará en establecimientos de las cadenas de CIMEX, Tiendas Caribe, TRIMAGEN y Caracol, así como en los MAI y Mercados Ideales, aunque las tiendas en MLC, los mercados agropecuarios y otros quedan fuera de esta regulación.
Para aquellos casos excepcionales que residen en un municipio pero su carnet de identidad no lo refleja, los Consejos de Defensa Municipales (CDM) emitirán una Tarjeta de Uso temporal, que se entregará por núcleo familiar, debiendo especificar su dirección. Si se requiere más de una tarjeta por núcleo, se evaluará de manera específica, con entrega organizada a nivel de Consejo Popular.
Asimismo, se reactivarán los puntos de venta en áreas donde la disponibilidad de ciertos productos es más limitada, creando una red de 154 puntos que recibirán productos al menos una vez a la semana.
Para los establecimientos situados en las calles que marcan los límites entre dos municipios, se permitirá que residentes de ambos territorios colindantes realicen compras, y los extranjeros con residencia permanente en el país podrán comprar en todos los municipios, al igual que otras personas cuya documentación oficial no contenga su dirección de residencia.
