Foto: RL Hevia
Texto: Fede Gayardo
La crisis electroenergética que enfrenta Cuba, con apagones diarios que a veces superan las 12 horas, ha llevado al Ministerio de Educación en Guantánamo a reestructurar los horarios escolares para adaptarse a la falta de energía.
Desde la provincia oriental, donde los cortes se han vuelto parte de la rutina, se anunció que las clases comenzarán ahora a las 9:00 a.m., una hora más tarde de lo habitual. Este ajuste, según las autoridades, proporciona a las familias la oportunidad de descansar un poco más tras las noches sin electricidad y con altas temperaturas.
El suministro eléctrico en las escuelas sigue siendo incierto, por lo que los padres tienen la autorización de recoger a sus hijos antes de lo previsto. En los círculos infantiles, la jornada, además, concluirá a las 2:30 p.m.
Antonio Tamayo Romero, subdirector general de Educación en Guantánamo, explicó en el programa Revista Guantánamo del telecentro Solvisión que entre las 8:00 y las 9:00 a.m. se organizarán actividades complementarias para “entretener” a los pequeños antes del inicio de las clases formales.
A pesar de las dificultades, el proceso docente se mantiene activo. En las escuelas secundarias sin merienda escolar, solo se impartirá una sesión diaria. Además, para mitigar la falta de agua, jabón y electricidad, se permitirá el ingreso a los centros educativos sin uniforme.
Crisis electroenergética en Cuba
Según un informe del 26 de mayo sobre el estado del Sistema Eléctrico Nacional, la Isla experimentó una afectación total de energía durante 24 horas continuas, marcada por un déficit de capacidad que alcanzó los 1,567 MW en las horas de mayor demanda. A las 7:00 a.m., solo había 1,935 MW disponibles para satisfacer una demanda de 3,050 MW, anticipándose un desbalance de hasta 1,635 MW en el pico diario.
Las principales causas incluyen fallos en la unidad 2 de la CTE Felton, mantenimientos en varias plantas termoeléctricas, restricciones térmicas y escasez de combustible y lubricantes en la generación distribuida, lo que suma un impacto de más de 700 MW.
Las 12 nuevas centrales solares instaladas en Cuba generaron 1,437 MW/h; sin embargo, esta cifra resulta insuficiente para cubrir el creciente consumo y el déficit persistente. La prolongación de los apagones continúa afectando la vida cotidiana de los cubanos, y no es sorprendente que ante esta situación las medidas adoptadas en Guantánamo se extiendan a otros territorios del país.
