Foto: Cuba Noticias 360
Miles de cubanos y venezolanos se han quedado sin respuestas desde la implementación, este lunes, de una nueva proclamación presidencial en Estados Unidos. Firmada por Donald Trump el 4 de junio, esta medida suspende indefinidamente los procesos de reunificación familiar para residentes permanentes legales, generando un cambio abrupto que ha dejado paralizados los trámites migratorios de numerosas familias.
El impacto ha sido inmediato. Decenas de solicitantes de visado, incluidos los ganadores del programa de Diversidad de Visas, han reportado la cancelación repentina de entrevistas y procedimientos en la Embajada de Estados Unidos en La Habana. “Hoy llamé y me dijeron que todo estaba cancelado. Estoy desesperado. Vendí todo lo que tenía porque soñaba con reunirme con mi familia en EEUU. ¿Qué voy a hacer ahora?”, compartió con Martí Noticias un solicitante cubano que prefirió permanecer en el anonimato.
La nueva medida se fundamenta en la Sección 212(f) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que históricamente ha sido utilizada para limitar el ingreso de extranjeros considerados como un riesgo. En esta ocasión, el argumento oficial es “proteger a Estados Unidos de terroristas extranjeros y otras amenazas a la seguridad nacional y pública”, de acuerdo con el documento entregado a los solicitantes.
Por ejemplo, José Hernández, quien ha esperado nueve años para reunirse con su madre en Miami, fue uno de los muchos afectados que recibió una notificación contundente. “Un oficial consular determinó que usted no es elegible”, decía el mensaje. Lo más preocupante para muchos es que, según establece la proclamación, la decisión no es apelable ni se somete a revisión en este momento.
La proclamación incluye restricciones parciales o totales para ciudadanos de 19 países, incluidos Cuba y Venezuela, lo que ha originado confusión y alarma entre quienes ya tenían citas programadas o expedientes en proceso. Fuentes verificadas del Departamento de Estado confirmaron a Martí Noticias que todas las peticiones familiares de residentes permanentes ahora se encuentran “en la misma situación”.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) respondió a una consulta de este medio con una declaración de la subsecretaria Tricia McLaughlin. La funcionaria explicó que esta acción es parte de un esfuerzo por presionar a ciertos gobiernos a colaborar con la recepción de vuelos de deportación, fortalecer la seguridad interna y “restaurar la integridad del sistema migratorio estadounidense”.
Por su parte, un portavoz del Departamento de Estado reconoció que aún no existen respuestas claras sobre el alcance completo de la medida. Sin embargo, adelantó que “es probable que muchos casos queden en pausa mientras se revisan las nuevas directrices”. A la par, se confirmó la suspensión de la emisión de visas de turismo (B1/B2), estudio (F, M) e intercambio (J), así como la mayoría de visas de inmigrante para ciudadanos de los países mencionados en la proclamación, incluyendo Cuba, Venezuela, Burundi y Sierra Leona.
