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Texto: Fede Gayardo
El gobierno de Cuba prosigue con su política de “mano dura” en contra de las drogas en la nación, como se evidencia en la sentencia de 20 años de prisión impuesta a un individuo por el cultivo de marihuana en Ciego de Ávila.
Una información proporcionada por el diario estatal Granma señala que su cómplice, quien fue condenado por no informar a las autoridades, enfrentará tres años en la cárcel. Además, ambos han sido sancionados con la pérdida de derechos públicos, la restricción de salir de la Isla y el decomiso de los instrumentos utilizados en el delito.
La sentencia se dictó en un proceso “oral, público y ejemplarizante”, que forma parte del tercer ejercicio nacional que el gobierno promueve para detener conductas que amenazan el orden político y social.
El órgano oficial del Partido Comunista enfatizó que se actuó “con apego a la Constitución y a las leyes”, en el marco de la política de “tolerancia cero” contra las drogas, enfocándose esta vez en el cultivo y no en el consumo o la distribución directa.
Familiares de los acusados, cuyos nombres no han sido revelados, junto a un grupo de estudiantes, estuvieron presentes en la audiencia, en una iniciativa de “prevención” y formación jurídica fomentada por el Tribunal Provincial Popular. En su perfil oficial de redes sociales, la entidad celebró la condena bajo el lema: “A la droga, ni un tantito así”.
Este incidente se suma a una serie de sanciones severas que el Estado ha estado haciendo públicas para respaldar sus acciones contra las drogas. Sin embargo, la creciente cifra de consumo de sustancias en diversas provincias sigue en aumento, lo que preocupa tanto a las autoridades como a la ciudadanía.
