Foto: Cuba en Miami
Yaquelin Domínguez-Nieves, una ciudadana cubana de 26 años, fue sentenciada este viernes por un tribunal federal en Miami a siete años y medio de prisión por su implicación en un caso de tráfico de personas que resultó en la muerte de 16 balseros en noviembre de 2022.
Domínguez-Nieves, quien residía ilegalmente en Estados Unidos, se declaró culpable el 21 de enero de haber conspirado para introducir migrantes cubanos por mar. La jueza Beth Bloom dictó la sentencia, aplicando una pena más severa de lo estipulado por las directrices federales, debido a la magnitud del desastre y la pérdida de vidas humanas, incluyendo niños y adolescentes.
La tragedia tuvo lugar el 16 de noviembre de 2022. En esa fecha, un bote pesquero, diseñado para solo ocho personas, zarpó desde Playa Jaimanitas en La Habana hacia la costa de Florida, con 18 migrantes a bordo. La embarcación se hundió a unas 30 millas de la costa. Solamente dos personas sobrevivieron, mientras que cuatro cuerpos fueron recuperados; el resto fue engullido por el mar.
La investigación demostró que Domínguez-Nieves, junto con un cómplice en Cuba, organizó y financió la operación. Recaudó más de 11,500 dólares de los familiares de los migrantes en el sur de Florida y envió el dinero a la isla para sufragar el viaje. El bote carecía de chalecos salvavidas y el capitán no tenía experiencia.
Este caso formó parte de la operación federal Take Back America, una iniciativa destinada a combatir redes de tráfico humano y organizaciones criminales transnacionales que se benefician de la desesperación de los migrantes. La investigación fue llevada a cabo por la Oficina de Investigaciones de la Guardia Costera, con el apoyo de la Patrulla Fronteriza y otras agencias federales.