Cuba apuesta hoy por la posibilidad de regresar a la Copa del Mundo de fútbol.

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Foto: Alesio Raballo | Instagram

Texto: Raúl del Pino

La próxima Copa del Mundo de la FIFA, que se llevará a cabo en conjunto en México, Estados Unidos y Canadá, representa una excelente oportunidad para la esperada clasificación de la selección cubana. Con un año restante para el inicio del torneo en el estadio Azteca –el 11 de junio de 2026–, un empate este martes contra Bermudas podría mantener vivo el sueño de los cubanos más que nunca.

El equipo dirigido por Yunielys Castillo solo necesita un punto para asegurar su lugar en la tercera y última ronda de las eliminatorias de Concacaf, donde tendrán la posibilidad de pelear por uno de los tres boletos directos disponibles o acceder a una de las dos plazas de repesca, entre un total de 12 competidores.

Desde su única participación en una Copa del Mundo en 1938, la selección cubana no había estado tan cerca de clasificar nuevamente como lo está ahora. La última vez fue en 1982, para el Mundial de España, donde alcanzaron la hexagonal final de Concacaf, aunque terminaron en penúltima posición.

Más de cuatro décadas después, se presenta una nueva oportunidad que podría no repetirse, dada la ampliación de las plazas mundialistas a 48 y la garantía de cupos por parte de las tres potencias de Norteamérica al ser sedes.

Cuba inició su camino hace un año, sufriendo una derrota como visitante (3-1) ante el líder del grupo, Honduras, en Tegucigalpa. Sin embargo, tres días después, se anotó una victoria por 3-0 sin jugar, ya que el equipo de Islas Caimán no se presentó en Santiago de Cuba para el siguiente encuentro.

Desde aquella jornada eliminatoria de la FIFA hasta ahora, la selección nacional ha enfrentado múltiples dificultades: primero, cayó en la Liga de Naciones, y luego se quedó a las puertas de la Copa de Oro con la lesión de su capitán y principal goleador, Luis Javier Paradela.

No obstante, llegan buenas noticias con la inclusión, por primera vez en seis décadas, de jugadores nacionalizados. Una nueva generación de jóvenes talentos nacidos en Europa de padres cubanos ha elevado el nivel del equipo tricolor y renovado las esperanzas de los seguidores.

De hecho, la actuación de algunos de estos futbolistas fue uno de los aspectos más positivos en la victoria 0-1 del pasado viernes en Antigua y Barbuda, que dejó al equipo cubano con 6 puntos en el segundo puesto del grupo A, seguido por los bermudeños (4), el último obstáculo en su camino hacia la Copa del Mundo.

Teóricamente, la selección nacional es favorita para conseguir el objetivo. Jugarán como locales ante su afición y solo necesitan un empate. Sin embargo, la táctica no debe ser defensiva, sino intentar ofrecer el juego atractivo que tanto se espera y aprovechar la frescura de sus jugadores internacionales, quienes han demostrado su calidad en ligas extranjeras.

El once que presentará el DT Castillo en el campo sintético del Antonio Maceo en Santiago no debería variar mucho del que utilizó el viernes en Saint John. Los referentes en ataque serán el debutante Jorge Aguirre y Alesio Raballo, dos de los nuevos nacionalizados, siendo el primero un jugador con un rendimiento sólido en la Liga portuguesa y el segundo defendiendo los colores del equipo filial del Torino italiano.

En el mediocampo, Onel Hernández jugaría por una banda y Yasnier Matos por la otra, con Diego Catasus y Karel Espino formando el doble pivote. En la defensa, el flamante goleador ante Antigua, Pedro Bravo, formará pareja en el centro con Cavafe, mientras que Orlando Calvo y Karel Pérez cubrirán las bandas.

Una de las principales bajas será el arquero Raiko Arozarena, quien no viajará a Cuba por recomendación de su club en Estados Unidos, Las Vegas Lights, debido a la incertidumbre sobre su regreso a territorio norteamericano por las estrictas políticas migratorias impuestas por el presidente Donald Trump. Ismel Morgado se perfila como la opción para ocupar su lugar.

A pesar de jugar como visitantes, Bermudas no será rival sencillo, llegando con la moral alta tras golear 5-0 a Islas Caimán. Sin embargo, en 2024 debutaron con un empate a uno frente a Antigua, seguido de una dura derrota de 1-6 ante Honduras en casa.

Cuba no podrá contar con el arquero Raiko Arozarena para su partido ante Bermuda.

El jugador regresó a EUA, a sugerencia de su liga y club, temiendo problemas legales por las nuevas leyes migratorias que restringen la entrada a esa nación a nacionales de 19 países, Cuba incluido. pic.twitter.com/yXOl8iEYaF

— Alexander Ramírez Tápanes (@ramirez_tapanes) June 9, 2025

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