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El sistema judicial de Argentina atraviesa un escándalo tras la anulación del juicio que busca determinar las responsabilidades en la muerte del ícono nacional Diego Armando Maradona, ocurrida el 25 de noviembre de 2020.
El proceso fue declarado nulo la semana pasada debido a la participación de la jueza Julieta Makintach en una miniserie documental sobre el caso. Como resultado, se anuló toda actividad desde el 6 de marzo, y se deberá formar un nuevo tribunal, lo que podría posponer el nuevo juicio hasta el próximo año.
Tanto la familia del ídolo futbolístico como los siete acusados solicitaron unánimemente que todo se reinicie desde cero, dada la sospecha que recae sobre la magistrada involucrada, quien era una de las tres miembros del tribunal y ya había sido apartada dos días antes de esta decisión.
El presidente del juzgado, Maximiliano Savarino, declaró que Makintach no cumplió con la imparcialidad necesaria para el adecuado desarrollo del juicio y evidenció “un interés personal” en el mismo.
El tráiler del mencionado material audiovisual se presentó en la sala del tribunal, generando reacciones de ambas partes con calificaciones como “bochorno mundial”, “inaudito” y “vergonzoso”, según informa el diario El País.
El citado medio destaca que el tiempo dedicado a la jueza en el corto avance casi duplicaba el dedicado al joven de Fiorito que llevó a Argentina a la gloria en el Mundial de México 1986, y cuya muerte sumió al país sudamericano en la tristeza.
Además, una de las hijas de Maradona, Dalma, declaró a los medios que sus abogados les aconsejaron pedir la anulación “porque si esto se descubría después de los veredictos, quedaría todo anulado y no podría repetirse el juicio”.
Una vez que los ánimos se calmen por esta inaudita situación que tiene al país conmocionado, el siguiente paso del Poder Judicial será nombrar a los jueces que se encargarán del nuevo sumario. En este sentido, la fiscalía ha pedido que se realice “con la mayor brevedad posible y con la urgencia que el caso requiere”, e incluir un cuarto magistrado o juez sustituto.
El juicio anterior inició el 11 de marzo y se extendió a 21 audiencias antes de su anulación. Se habían presentado 44 testigos, incluidas tres hijas de Maradona, que no han ocultado el impacto que este retraso ha tenido en ellas.
La acusación interpuesta por la familia del exjugador de Nápoli y Barcelona, entre otros clubes, imputa de homicidio simple con dolo eventual a ocho profesionales de la salud, incluidos médicos, enfermeros y un psicólogo, por negligencia grave durante la atención domiciliaria que recibía el astro del fútbol tras someterse a una cirugía por un hematoma subdural.
