Fotos: Jorge Luis Borges
Este martes, Cuba reportó mil 51 contagios de Covid-19, la cifra más alta desde el inicio de la pandemia. Marzo se despide como el mes con peores números en el control de la enfermedad. En este contexto, el Consejo de Defensa Provincial (CDP) de La Habana ya había comenzado a regañar a las autoridades de salud y gobierno, sin dejar de lado a la población capitalina.
El CDP fue establecido en cada provincia para controlar el coronavirus y, cada vez más, se convierte, ante la mirada pública, en un órgano dedicado a reprender a sus miembros, quienes son los mismos responsables de frenar una situación epidemiológica que no da tregua en la isla. Esto se debe a que parece que se incumplen muchos de los protocolos establecidos.
Recientemente, en una reunión habitual del grupo, se hizo un llamado a elevar la percepción del riesgo, a incrementar los sistemas de control y a ser más severos para mejorar el aislamiento físico y social, así como el cumplimiento de los protocolos médicos, ante el rebrote de la COVID-19. Esto fue destacado por el periódico Tribuna de La Habana, que enfatizó las fuertes críticas de Luis Antonio Torres Iríbar, presidente del CDP, al sistema de salud.
Reinaldo García Zapata, vicepresidente del CDP, comentó que la alta cifra de contagios es evidencia de fallas acumuladas en el trabajo y exhortó a ser estrictos en el cumplimiento de dos acciones fundamentales: realizar las pesquisas correctamente y aislar de forma efectiva a todos los contactos de casos positivos.
“Esto hay que frenarlo en seco y todos deben asumir su rol para revertir la situación actual”, recalcó García Zapata.
Para más acciones, el CDP anunció la creación de un grupo de inspección compuesto por un pequeño número de dirigentes con experiencia, con el objetivo de examinar y detectar infracciones de las medidas de enfrentamiento al Covid-19. Este grupo tendrá la capacidad de aplicar acciones en los consejos municipales y áreas de salud.
En medio de esta alerta, el candidato vacunal Soberana 02 (reconocido por los medios nacionales como vacuna) ha sido administrado al 88% de la población capitalina seleccionada para la actual fase del ensayo clínico III. Torres Iríbar insistió en que “el fármaco fortalece el organismo para enfrentar la enfermedad, pero aún las personas vacunadas pueden transmitir la COVID-19”, lo que obliga a mantener rigurosamente las medidas de protección contra el coronavirus.
No obstante, la comunidad científica local ha brindado confianza en la eficacia y seguridad de Soberana 02, cuya fase III de ensayo clínico “evaluará la reducción de la incidencia y la dispersión de la pandemia a nivel poblacional”. Además, se está aplicando en un ensayo de intervención con 150 mil voluntarios en la capital, autorizado por el Centro Estatal de Ensayos Clínicos y Medicamentos (CECMED), que ha anunciado la posibilidad de decidir un uso de emergencia para una inmunización masiva.
Actualmente, La Habana permanece cerrada debido a la fase de transmisión autóctona limitada. Iríbar, también secretario del Partido Comunista en la capital, apuntó que esta situación continuará hasta que las condiciones permitan avanzar a otra etapa, según los indicadores necesarios.
Entre las ordenanzas de estricto cumplimiento vigentes se encuentra un toque de queda que abarca desde las 9 de la noche hasta las 5 de la madrugada, el cual es violado por muchos ciudadanos que buscan alimentos y medicamentos en largas filas. Además, se ha cerrado un número considerable de consultas médicas en hospitales e institutos de especialidades, lo que dificulta que los pacientes reciban seguimiento clínico, dejándoles como única opción acudir a las emergencias o buscar especialistas fuera de las instituciones.
A pesar de esto, el transporte urbano sigue funcionando con aglomeraciones, lo que se ha convertido en una inevitable fuente de contagios y es fundamental para que los trabajadores lleguen a sus respectivos centros. En este contexto de cuarentena, no hay excepciones para aquellos considerados vulnerables, en un momento que coincide con un nuevo ordenamiento monetario, que muchos consideran el peor en 62 años de revolución socialista, y que se ha concebido para revitalizar la deteriorada economía cubana.
Además, ante las críticas de los líderes del país, el CDP de La Habana instó a investigar la considerable cantidad de personas que dan positivo en el primer PCR y luego negativo en las pruebas repetidas, lo que distorsiona los resultados, congestiona las capacidades hospitalarias y podría deberse a errores en el manejo de las muestras, según reporta Tribuna de La Habana.
También se mencionó que hay familias que ignoran las orientaciones del correcto ingreso domiciliario, convirtiendo las viviendas en puntos de contagio principales.
Las opiniones del público tampoco se pasaron por alto en la reunión, donde se reclamó la falta de atención a las personas aisladas en sus casas en municipios como Marianao, la falta de materiales sanitarios para médicos de familia y denuncias por incumplimiento de medidas de bioseguridad en barrios de Centro Habana y Diez de Octubre.
El informe del Ministerio de Salud Pública de este miércoles señala que la isla cuenta con 75 mil 263 diagnosticados con Covid-19, 66 pacientes en terapia intensiva, 30 de ellos en estado crítico y 36 graves, además de 424 fallecimientos a lo largo de la pandemia. La Habana se mantiene como el epicentro del virus con 477 nuevos contagios.
