El conocido cantante de música urbana Yomil Hidalgo, fundador del dúo Yomil y El Dany, lanzó este jueves el videoclip del tema «De Cuba soy», dedicado a las protestas masivas del pasado 11 de julio.
El artista indicó que el video, dirigido por Yimit Ramírez, está destinado a “todos los cubanos, y al 11 de julio de 2021, el día en que el pueblo despertó”.
Asimismo, lo dedica a “todos los que arriesgaron su vida en el mar; a aquellos que sufren en silencio y al pueblo que clama por un cambio”.
En el clip, se presentan animaciones de grandes figuras de la historia política, intelectual y musical de Cuba, como José Martí, Antonio Maceo, Mariana Grajales y Camilo Cienfuegos; así como la escritora Dulce María Loynaz, y los músicos Benny Moré y Celia Cruz.
Yomil también recuerda en el video a su ex compañero Daniel Muñoz, “El Danny”, quien falleció hace más de un año en el hospital Calixto García de La Habana.
Este tema sigue la línea crítica contra el gobierno cubano que ha mantenido el reguetonero en tiempos recientes; él fue detenido durante las protestas del 11J y llevado a una estación de policía de La Habana, donde sus seguidores clamaron por su liberación.
El músico, que demanda en la canción “un estado de derecho y de libre expresión” y repite en varias ocasiones “estamos pidiendo libertad”, ha afirmado que «De Cuba soy» es el tema “más importante de su carrera”.
Después de su participación en las manifestaciones, el cantante confesó temer por su vida y declaró que haría responsable al gobierno cubano si le sucediera “algo en el futuro”.
Su implicación y detención en las protestas fueron precedidas por fuertes declaraciones que hizo en su perfil de Instagram, dirigidas al presidente cubano Miguel Díaz-Canel.
“Díaz-Canel, póngase los pantalones bien puestos y si tiene que tomar medidas severas contra su gabinete y gobierno, tómelas, para cortar de raíz todo el daño que le están ocasionando a nuestro país las decisiones de los líderes”, escribió el cantante.
“Yomil y el Dany” han modificado su discurso musical en los últimos meses para incluir temas con mayor contenido social y críticas a la situación en Cuba, enfocándose en los derechos humanos y la precariedad, entre otros.
El cantante sigue en las listas de popularidad del género urbano y ha continuado trabajando en diversos proyectos durante la pandemia.
La canción finaliza con una condena al Decreto-Ley 35, una legislación que, según muchos cubanos, legitimiza la censura de contenidos en Internet que las autoridades consideran contrarios a sus intereses.