Foto: Jorge Luis Borges | Cuba Noticias 360
Con el propósito de ampliar sus servicios en la Isla, permitiendo que sus diplomáticos sean acompañados por algunos familiares, el Gobierno de Estados Unidos dio este viernes “un primer paso” en el fortalecimiento de su embajada en La Habana.
Es importante recordar que este gobierno redujo la plantilla de su sede diplomática en Cuba en 2017, cuando el entonces presidente Donald Trump acusó a las autoridades cubanas de ser responsables de presuntos ataques contra los funcionarios acreditados.
Antes de ese momento, ya se habían reportado síntomas como dolor de oído entre los diplomáticos estadounidenses desplegados en La Habana, como resultado de un sonido de alta frecuencia, lo que llevó a Washington a retirar la mitad de su personal en la embajada y a expulsar a diplomáticos cubanos en respuesta.
De hecho, un informe interno hecho público a principios de 2021 reveló que Trump acusó a La Habana sin pruebas y que la mala gestión y la falta de coordinación marcaron su respuesta a estos supuestos “ataques”.
Además, dos biólogos evaluaron una grabación relacionada con el ruido y aseguraron que corresponde al sonido que producen los grillos de cola corta de las Indias, que se encuentran a lo largo del Caribe. Sin embargo, el estudio no analizó la causa de los malestares, aunque los biólogos no descartan que los diplomáticos hayan sufridos un ataque sónico en otra instancia.
La noticia sobre el refuerzo del personal ha sido confirmada por un funcionario del Departamento de Estado, quien pidió mantener el anonimato, y ha informado sobre el cambio en el estado de “sin acompañantes” a “parcialmente acompañados” para los diplomáticos destinados en la embajada en La Habana.
Una nota de la agencia EFE señala: “El presidente Biden se ha comprometido a fortalecer la plantilla de su embajada en La Habana para asegurar nuestra capacidad de relacionarnos con la sociedad civil y, en el momento apropiado, aumentar nuestros servicios consulares a los cubanos, al tiempo que garantizamos la seguridad de nuestros diplomáticos en Cuba”. Además, agregó: “Este es un primer paso en ese proceso”.
Durante su campaña electoral, Biden prometió volver al deshielo con Cuba y revertir muchas de las sanciones impuestas por el ex presidente Donald Trump (2017-2021), pero sus planteamientos parecen haber cambiado desde que asumió el cargo en enero de este año.
Tal es el caso, que en julio el Departamento del Tesoro anunció nuevas sanciones dirigidas a cubanos, incluyendo a la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y a dos de sus líderes, tras las protestas del 11 de julio por su presunto papel en la represión de las manifestaciones antigubernamentales en Cuba.
Nada resulta sorprendente, ya que un informe de la agencia AP de julio ya daba detalles sobre esta decisión. El presidente Biden había ordenado al Departamento de Estado que creara un grupo de trabajo para revisar la política federal de remesas, con el fin de garantizar que el dinero que los cubano-estadounidenses envían a Cuba llegue directamente a sus familiares sin que el gobierno cubano se quede con una parte, además de evaluar la viabilidad de incrementar el personal de la embajada estadounidense en La Habana.
