Yuniel Castillo Rodríguez, trabajador del Aeropuerto de La Habana, teme ser deportado a Cuba tras el rechazo de su solicitud de asilo político. Llegó a EE.UU. como polizón en un avión de JetBlue, haciéndose pasar por un pasajero más.
En una entrevista con el canal Univisión, comentó: “Las autoridades me han informado que se negó el asilo en la última corte. Ellos consideran que no había pruebas suficientes para otorgar un asilo político en EE.UU.”
Este ciudadano también denunció que a su esposa la detuvieron en Cuba el pasado 11 de diciembre.
Castillo agregó que tienen dos hijos, uno de ellos en etapa de lactancia. “A mi esposa la llevaron detenida para hacerle unas preguntas. Realizaron un registro en la casa, se llevaron la computadora y el teléfono, supuestamente buscando información. Hasta el día de hoy no sé nada de ella. No tiene internet, marco y no me responden; desconozco dónde puede estar”.
Yuniel Castillo Rodríguez criticó una filtración en la página web del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU., con fecha del 28 de noviembre, que reveló información confidencial de más de medio centenar de cubanos, él incluido.
Tras esta filtración, casi 60 cubanos están detenidos en el Centro de Detención para Inmigrantes de Pompano Beach, en el condado de Broward.
Para Yuniel Castillo, salir de Cuba fue relativamente fácil, ya que su trabajo en el aeropuerto le daba acceso hasta la puerta del avión. Al llegar al aeropuerto de Fort Lauderdale, se entregó a las autoridades migratorias y solicitó asilo político.
Hace varias semanas, este cubano expresó: “Si regreso a Cuba, me pueden imponer más de 25 años de prisión por haber desertado, por haber viajado escondido en un avión. Tengo un niño pequeño y la incertidumbre de lo que pueda suceder. Todos los que estamos aquí sentimos ese temor”.
Un caso similar ocurrió a inicios de esta semana, cuando otro cubano que trabajaba en el Aeropuerto Internacional «Antonio Maceo» de Santiago de Cuba también viajó como polizón a EE.UU. en un vuelo chárter de Swift Air.
