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Recientemente, un grupo de aficionados a las patinetas y skaters denunciaron a través de las redes sociales que las autoridades de Ciudad Libertad les habían prohibido el uso de una de las áreas de patinaje, ya que sería demolida.
En los últimos tiempos, un grupo de fanáticos de este deporte y otros similares había acondicionado un área en Ciudad Libertad donde crearon rampas y otras estructuras para la práctica de este deporte, que también está muy relacionado con el arte urbano.
Lo que se convirtió en el skatepark de Ciudad Libertad fue objeto de denuncias en las redes sociales. “Hagamos saber al mundo el sacrificio y trabajo que hemos realizado para transformar un lugar que estaba olvidado, donde nosotros los skaters y otros amantes de los deportes extremos pintamos, reparamos y llenamos de vida el gimnasio de Ciudad Libertad”, expresó en Facebook el patinador Helier Cruz, uno de los impulsores del proyecto del parque.
Frente a esta movilización cívica, los patinadores anunciaron este fin de semana que, por el momento, los planes de demolición estaban suspendidos y que esperaban una reunión con las autoridades locales.
“Gracias por compartir. Han detenido la demolición… ahora toca reunirse con los decisores para ver qué se hace. Muchos jóvenes se sienten (y lo son) dueños de un espacio abandonado que han rescatado y adaptado a sus necesidades… acompañémoslos”, escribió en Facebook el diseñador cubano Roberto Ramos, quien ha colaborado con la ambientación del lugar a través de sus diseños.
El grupo de patinadores decidió hacer la denuncia en las redes sociales porque funcionarios del INDER les comunicaron que no tenían influencia alguna en la decisión tomada.
Muchos seguidores del deporte, así como familiares de los patinadores, opinaron que la destrucción del lugar sería un crimen, ya que durante mucho tiempo los jóvenes y adolescentes contaron con un espacio para recrearse sanamente.
Según la ley vial vigente, no se puede patinar en espacios públicos, lo que deja a muchos de estos jóvenes atrapados entre quebrantar la ley o conformarse con espacios muy pequeños.
