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Los trabajos de construcción del nuevo cementerio de Ciego de Ávila muestran “discretos avances” tras casi dos años desde su inicio, coincidiendo con la fecha programada para la exhumación de los restos de quienes fallecieron a causa de la COVID-19.
De acuerdo con un reporte del periódico local Invasor, la edificación comenzó en agosto de 2021, en un momento en que “Ciego de Ávila atravesaba el pico más alto de contagios y muertes ocasionados por el SARS-CoV-2”.
A medida que se acerca el segundo aniversario y se vuelve necesario proceder con la exhumación, se han intensificado las jornadas laborales en el nuevo camposanto, ubicado a las afueras de la capital provincial, junto a la Circunvalación Sur y la carretera hacia Sanguily.
Bárbara Domenech Nodarse, especialista en Inversiones de la Dirección Provincial de Comunales, mencionó al periódico que este año se prevé un presupuesto de 6.5 millones de pesos, destinados a la edificación de 36 baterías de osarios, con una capacidad total de 3000, de las cuales se están ejecutando 1900.
Desde la constructora encargada de la obra, se ha señalado que actualmente hay de 10 a 14 obreros trabajando de lunes a viernes, y “si el número no es mayor es debido a la limitación de recursos materiales”, añadió Yosbel Montes de Oca Rodríguez, director de la empresa constructora.
“La madera escasea, hay tres losas que llevan tres semanas esperando el hormigón y la disponibilidad de agua es limitada”, amplió Montes de Oca.
Más adelante, Domenech Nodarse indicó que en 2021 se asignaron 25,762,000 pesos, cifra que superó más del doble el plan inicial de 12 millones. Además, la directiva reconoció que en 2022 “solo se ejecutaron 3 de los 20 millones aprobados en el plan”.
Para concluir, se señala que “se requiere una mayor inyección de recursos para acelerar el progreso” y que es preocupante “la urbanización del amplio terreno, especialmente la construcción de los viales interiores, que es de los aspectos más atrasados y de los mayores desafíos; considerando que en agosto de 2023, este momento debe ser de memoria y respeto para las familias avileñas”.
