Según los datos proporcionados por el consorcio estatal PDVSA, Venezuela envió menos petróleo a Cuba en enero, con un total de 57 mil 500 barriles diarios (bpd) de crudo, fuel oil y otros productos refinados, casi la mitad de los 1.23 millones bpd que se enviaron en diciembre.
Esta disminución en las exportaciones de crudo se debe a una decisión del presidente ejecutivo de PDVSA, Pedro Tellechea, quien optó por congelar la mayoría de los envíos mientras se revisaban los contratos.
De hecho, una vez que este funcionario asumió su cargo a principios de 2023, canceló la mayoría de las exportaciones para revisar los términos contractuales, con el fin de identificar a los compradores que se retiraban sin cumplir con todos sus pagos.
Obviamente, esta medida tuvo graves repercusiones dentro de PDVSA, hasta el punto que las exportaciones cayeron un 19% en comparación con lo enviado al mercado internacional en diciembre.
Varios medios de comunicación destacan que los niveles de exportación durante enero reflejaron un promedio de 558 mil 419 bpd de crudo y combustible.
Esta cifra es la más baja desde julio pasado, cuando también se implementaron varios cambios contractuales que provocaron una fuerte disminución en las ventas de PDVSA.
Es importante señalar que Cuba depende en gran medida del petróleo venezolano, ante la crítica situación en su generación de electricidad.
Solo en octubre, PDVSA envió a Cuba alrededor de 52 mil barriles de petróleo por día, en medio de una crisis en las exportaciones. En este contexto, la empresa estatal venezolana y sus asociaciones mixtas exportaron un total de 533 mil 968 bpd en 25 cargamentos, lo que representó una caída del 25% en comparación con septiembre y el cuarto promedio más bajo de 2022.