Foto: EFE
Una delegación de congresistas estadounidenses, compuesta por Salud Carbajal, Jim Baird y Jahana Hayes, manifestó su interés en continuar la inversión de su país en el sector agrícola cubano. Los funcionarios concluyeron un viaje de cuatro días a la nación cubana, como parte de la delegación bipartidista del Congreso a Cuba en representación de los Estados Unidos y el Comité de Agricultura de la Cámara.
Durante la visita, se llevaron a cabo reuniones con agricultores cubanos, operadores de negocios agrícolas y funcionarios locales para discutir la situación actual de la agricultura en Cuba. En este contexto, el congresista demócrata Carbajal emitió una declaración en su página oficial.
“Nuestro viaje a Cuba representó una oportunidad significativa para observar el impacto de la agricultura estadounidense en una nación que depende en gran medida de las importaciones agrícolas de Estados Unidos. Como miembros del Comité de Agricultura de la Cámara de Representantes, trabajamos semanalmente en Washington para comprender cómo la agricultura y el comercio agrícola de nuestro país están influyendo en las comunidades de todo el mundo, y Cuba es un claro ejemplo de ello,” afirmó en nombre de la delegación.
Los integrantes del Comité de Agricultura de la Cámara también fueron recibidos por el Vicepresidente de Cuba, Salvador Valdés Mesa, así como por funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y Representantes de la Asamblea Nacional.
Respecto a las reuniones con representantes del sector agrícola cubano, la declaración de la delegación subraya: “también tuvimos la oportunidad de conversar con agricultores y expertos locales para entender mejor la dinámica de las operaciones agrícolas en Cuba, así como discutir posibles oportunidades de beneficio económico mutuo entre las empresas estadounidenses y el pueblo cubano. Esperamos compartir nuestros hallazgos con nuestros colegas y el resto de nuestro comité en las próximas semanas.”
Además de los temas comerciales, la delegación del Congreso también expresó su preocupación por los derechos humanos, la migración y los asuntos consulares en la isla.