Texto: Darcy Borrero
El título “Israel Rojas no es industrialista” podría lucir apropiado, pero en un entorno de polarización política que permea incluso el arte, resulta inadecuado. En una prolongada entrevista de más de hora y media conducida por Ian Padrón, Israel Rojas ofreció declaraciones que podrían servir para veinte titulares. Una de las características innegables del director del grupo musical Buena Fe es su habilidad para generar frases que impactan en cada respuesta. Durante la charla a través de Facebook, el intérprete oriundo de Guantánamo expresó: “me moriré siendo de izquierda”.
Asimismo, Israel Rojas afirmó: “Soy un hombre absolutamente libre y digo lo que pienso. Porque he llevado tanto aplausos como patadas, que agradezco casi en la misma medida”. En respuesta a la pregunta sobre si había censurado algún tema de conversación, enfatizó: “No tengo ningún problema en hablar sobre cualquier asunto”.
Aparte de repasar la trayectoria musical, conciertos y giras del grupo (incluyendo presentaciones en Miami), Israel utilizó el tiempo de transmisión para compartir sus perspectivas a partir de las interrogantes planteadas por los usuarios que seguían la charla en vivo.
En cuanto a los conciertos en Miami y Tampa, expresó que se sintió muy bien porque pudo ofrecer el mismo repertorio y secuencia tanto en La Habana como en Miami. Sin embargo, varios usuarios señalaron que los artistas radicados en Miami no pueden expresarse de la misma manera debido a que sus experiencias se asemejan a un exilio.
Ian Padrón mostró su pasaporte cubano y su carnet de identidad ante la cámara, indicando: “Este es mi pasaporte vigente y mi carnet de identidad de Cuba. En mi experiencia (no soy un extraterrestre, he vivido y trabajado 40 años en Cuba), nunca he presenciado en 60 años una realidad distinta, ni respeto para las opiniones divergentes de Oswaldo Payá”.
Israel subrayó que “nadie piensa igual que nadie, eso es un sinsentido”. Esta afirmación fue una de las que guió el debate. A casi dos horas de discusión, Israel fue interrogado sobre la construcción de la democracia en Cuba y las concepciones del unipartidismo y pluripartidismo. Respondió que no cree que el pluripartidismo garantice democracia y que toda noción de partidismo queda fuera de su entendimiento de democracia, que, según él, está definida por la participación popular. Resaltó que el Partido Comunista de Cuba ha competido con el mayor imperio del mundo en los últimos 60 años, lo que ha impedido que la sociedad cubana desarrolle plenamente sus potencialidades.
Uno de los momentos más destacados de la entrevista, que abarcó temas sobre la participación política de los cubanos de ambas orillas y el respeto a la diversidad de opiniones, ocurrió cuando se le consultó específicamente sobre el Movimiento San Isidro y su líder, Luis Manuel Otero Alcántara.
La artista visual y miembro del movimiento 27N, Camila Lobón, aseguró que Otero Alcántara está en huelga de hambre y sed, como han reportado varios medios. Le preguntó a Israel su opinión sobre la situación de un artista que ha sido detenido y interrogado en numerosas ocasiones por las autoridades cubanas, además de denunciar que sus más recientes obras fueron confiscadas por la Seguridad del Estado.
Al ser cuestionado sobre artistas que no se alinean con el gobierno cubano, y en particular sobre Otero Alcántara, argumentó que algunos no son artistas, aunque él respeta la percepción de cada quien como tal. Tania Bruguera, reconocida artista cubana y directora del Instituto de Artivismo Hannah Arendt, también participó en el debate a través del chat, donde algunos usuarios enfatizaron la necesidad de ir más allá de la repetitiva frase “pensar diferente” en un contexto de violaciones a los derechos humanos.
“Deseo que todos sean felices y puedan hacer lo que deseen. Creo en dos principios: la libertad de uno llega hasta donde afecta la de otro, y no hagas a nadie lo que no te gustaría que te hicieran”, agregó.
Así, sugirió que no apoya la coacción contra artistas cubanos: “Nadie debe ser juzgado por sus ideas, sino por sus acciones y si estas constituyen delitos, deben enfrentar las consecuencias”. Aclaró que si había una orden judicial por alguna violación, eso estaba justificado, pero en términos generales, no defiende acciones como allanamientos de morada.
A pesar de hablar de libertad de expresión y su “ser de izquierda”, Israel repite patrones de adoctrinamiento sistemático, insinuando que las personas no se valoran por su historia —citado como ejemplo el caso de generales que fueron depuestos por el gobierno revolucionario cubano— al compararlos con Bruguera. Según su lógica, hasta los generales han sido condenados, ¿qué se podría esperar de una artista, sin importa cuán significativa sea su obra?
El intérprete y compositor insistió en que “es más fácil que ustedes (cubanos en el exterior) compren (la historia de) ‘el humo, la ‘huelguita’ de hambre y la tontería”, invitando a su entrevistador a que conociera y amplificara las historias de cubanos que, según él, realmente están aportando al país. Mencionó a agricultores y emprendedores como Dayron Robles, que tras su carrera deportiva lanzó un negocio.
Israel defendió la postura de los medios oficiales como “hegemónicos” y criticó los medios basados fuera de Cuba, donde, según él, se alimenta la “desinformación”. Reconoció que la escasez y la crisis económica en la isla son “groseras”, pero consideró que tras algunos medios hay “mucha sociometría, mucho dinero”, y “esa es solo una parte de la realidad, no la única”. Resumió lo que relatan ciertos medios no oficiales y el testimonio de artistas contestatarios a “performance”, a pesar de que una frase del INSTAR dice “esto no es un performance”, apuntando a la urgencia y al riesgo que enfrenta la vida de Otero Alcántara.
“Considero que son performances para posicionarse en el mercado”, comentó Israel, quien afirmó estar ajeno a ciertos relatos mediáticos en este momento. Enfatizó que sus prioridades incluyen “la Champions, mi hijo que no vive conmigo, un pariente con COVID-19 y trabajar en mi música. Esa información no es parte de mi vida”. Israel recalcó que está confinado y dedica su tiempo a informarse sobre lo que le interesa.
“Que (Otero Alcántara) encuentre una salida y que por su propio bien y el de su familia no le ocurra nada negativo”, comentó.
Padrón le preguntó si tendría la misma perspectiva respecto a las reacciones de la seguridad del Estado si su hijo adoptara posturas similares a Otero Alcántara, a lo que este respondió: “Trato de educar a mi hijo como mis padres me educaron a mí: rebelde, justiciero, interactuando con aquellos que piensan diferente”. No obstante, afirmó que lo asumiría “siempre con las herramientas que la vida me dio, tratando de causar el menor daño posible a Cuba, a mi familia y a la humanidad; esos son los principios que rigen mi vida”.
En otros temas, los participantes del diálogo llegaron a ciertos consensos. Un punto de coincidencia fue en relación con los médicos cubanos exiliados. Israel expresó que no cree justo que los médicos que deserten enfrenten 8 años de destierro sin poder regresar a ver su tierra ni a su familia. “Eso es inhumano, no desde el punto de vista de eficacia de la medida, sino por el costo humano”, precisó. Similarmente, mencionó el caso de la periodista Karla Pérez, quien, después de estudiar 4 años en una universidad de Costa Rica tras ser expulsada de un centro educativo en Cuba, no le permitieron viajar de Panamá a La Habana para reintegrarse a su país.
Ian Padrón destacó que Israel es un artista que no teme expresar sus ideas y defender su postura. Recordó como un gesto positivo cuando, en tiempos difíciles para Los Aldeanos, Rojas ofreció un concierto en el Karl Marx e incluyó a la agrupación.
La entrevista concluyó con la pregunta sobre si Israel cree en una Cuba con todos y para el bien de todos, a lo que él respondió que “el destino de Cuba debe ser un eterno Baraguá con todos y para el bien de todos”. El artista, que continúa fijando su visión de Cuba como una plaza sitiada que debe defenderse desde adentro, comentó que no cree que deba permitirse la participación política de quienes abogan por la anexión a Estados Unidos.
“No soy tan ingenuo, no soy tan imprudente; tengo hijos y no deseo que me los desvíen del camino del amor”.