Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
Según información oficial, esta semana arribará a la isla un buque cargado de gas licuado al puerto de Santiago de Cuba. Tras la descarga, el barco se dirigirá a otras terminales portuarias del país hasta llegar a La Habana. Se espera que esto alivie la escasez de este combustible doméstico en los hogares del país.
La falta de gas licuado es evidente en casi todo el territorio nacional. En redes sociales y diversas fuentes de varias provincias se reporta que en algunas áreas ya se cocina utilizando carbón.
El buque mencionado llegó a Santiago la noche del martes. Según Lidia Rodríguez Suárez, directora Comercial de la Empresa de Comercialización de Combustibles de la Unión Cuba Petróleo (CUPET), la distribución del gas comenzó hoy a las 7:00 am en la provincia.
Rodríguez Suárez comentó que el barco se dirige a la capital con el fin de restablecer la distribución lo más pronto posible.
Una vez que el gas licuado llegue a las localidades, se activarán tanto las plantas de llenado como los puntos de venta, que tendrán un horario extendido, explicó la funcionaria.
Ella añadió que se intensificará el esfuerzo para acelerar el proceso, utilizando recursos humanos y logísticos para mejorar la eficacia en la distribución y aumentar las ventas en los primeros días, tras el desabastecimiento significativo.
Además, Rodríguez retoma las palabras del ministro de Energía y Minas de Cuba, mencionando que el país opera con baja disponibilidad de crudos refinables.
La escasez de gas licuado ha afectado a Cuba durante varios meses, aunque las máximas autoridades del país no se refirieron al tema durante semanas.
En marzo pasado, las colas para adquirir gas de balita en La Habana se extendían durante días, con cientos de personas esperando, según informes de medios estatales y no estatales de la isla.
En Pinar del Río, así como en el centro y el oriente cubano, la situación era tensa incluso desde antes. En enero, CUPET anunció que en Pinar se extendería el ciclo de venta de gas licuado en más de 20 días, y en febrero Camagüey reportó retrasos en la entrega debido a problemas de transporte.