Foto: RRSS
Texto: Fede Gayardo
La reconocida repentista cubana, Tomasita Quiala, se encuentra actualmente en el Hospital Hermanos Ameijeiras en La Habana, preparándose para una compleja cirugía cardíaca.
Tras un mensaje compartido en el grupo de Facebook Asociaciones de Cubanos Residentes en Canadá, muchos usuarios se han movilizado ante la urgente necesidad de ciertos medicamentos que estabilizarían su estado antes del procedimiento médico.
Entre los fármacos solicitados se encuentra el Sulfato de Brotamina en bulbo, utilizado para contrarrestar el efecto anticoagulante de la heparina. También se hace un llamado a los ciudadanos para conseguir Nadroparina o Enoxaparina en su presentación subcutánea, dado que “tiene las venas ya muy malas”, según señala la publicación.
“Queremos hacer un llamado a nuestra gran familia cubana para ayudar a la Reina del Repentismo Cubano, Tomasita Quiala, quien espera ser operada del corazón”, expresa el mensaje.
Más adelante se añade: “Tomasita está internada en el hospital Hermanos Ameijeiras de La Habana. Esperamos contar con una buena acogida a nuestra petición para que pueda ser operada cuanto antes”.
Tomasita, un emblema indiscutible de la décima improvisada en Cuba, ya había sido ingresada en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Leopoldito Martínez en San José de las Lajas, Mayabeque.
Después de varios días bajo estricta supervisión médica, recibió el alta, un hecho confirmado públicamente por el presidente Miguel Díaz-Canel a través de su cuenta en la red social X.
Reconocida como “La reina del repentismo” y “La ciega maravillosa”, la figura de Tomasita Quiala es esencial en el panorama cultural del país. Su carrera, marcada por el dominio del pie forzado y por tratar temas espinosos con agudeza poética, es un ejemplo de perseverancia, especialmente al abrirse paso como mujer invidente en un campo tradicionalmente dominado por hombres.
Formada en la escuela para ciegos Varona Suárez, Quiala comenzó desde niña a improvisar versos de manera espontánea. Su vínculo con la décima la ha llevado más allá de nuestras fronteras, cosechando elogios en escenarios de España, Portugal, México y Argentina. Su primera participación en una canturía en defensa de un colega marcó el inicio de una carrera que la consolidaría como una de las voces imprescindibles del repentismo cubano contemporáneo.
