Fotos: Emilio Rodríguez Pupo | Facebook
Texto: Hugo León
Menos de tres semanas después de que los bomberos lograran extinguir un gran incendio en Mayarí, Holguín, un nuevo fuego de grandes proporciones está afectando la provincia desde el sábado, específicamente en la zona montañosa de Pinares de Mayarí. Este incendio representa un peligro para cientos de personas y ya ha causado ciertos daños económicos.
Según informan los medios estatales, las llamas han provocado daños significativos en plantaciones forestales y, durante la noche de ayer, se encontraban fuera de control, precisamente en el momento más complicado para combatirlo, debido a la oscuridad.
El periodista Emilio Rodríguez Pupo mencionó que desde el mismo sábado, guardabosques, cuerpos de bomberos y otras fuerzas especializadas han estado luchando contra el fuego. Su estrategia busca evitar que las llamas lleguen a las áreas cercanas al campamento de La Presa, al Centro de Investigación para la montaña y al motel de la localidad.
El enfrentamiento contra el incendio se ha complicado por las fuertes ráfagas de viento en la zona y la sequía que afecta al territorio, con precipitaciones muy escasas en los últimos cuatro meses.
En la tarde de ayer, el periodista Rodríguez Pupo advirtió que las intensas corrientes de aire amenazan a los asentamientos de Pueblo Nuevo y Vivero 2, donde residen más de 600 personas. Sin embargo, poco después señaló que las autoridades provinciales estaban atentas a la posible evacuación de niños, mujeres embarazadas y ancianos.
Asimismo, presentó imágenes satelitales que ilustran la magnitud del incendio, además de fotografías propias que muestran el denso humo que rodea la zona y a los bomberos en plena labor para enfrentar el siniestro.
De acuerdo con las cifras oficiales del Cuerpo de Guardabosques de Cuba, el mes de enero de este año registró una cifra récord de incendios forestales en el país para ese mes, superando los 80 incidentes de este tipo.
Afortunadamente, la mayoría de estos fueron extinguidos antes de que superaran las cinco hectáreas de extensión, por lo que no pueden ser considerados “de gran magnitud”.
Las provincias más afectadas fueron Pinar del Río, Artemisa, Holguín y Camagüey.