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Después de garantizar al Club de París que el gobierno cubano cumplirá con el pago de la deuda, el vicepresidente cubano Ricardo Cabrisas viajó a Moscú para reunirse con el viceprimer ministro, Yuri Borísov. Durante el encuentro, se abordaron diversos temas, entre ellos la situación de la empresa Antillana de Acero.
En la actualidad, Moscú y La Habana están colaborando en la modernización de la empresa metalúrgica Antillana de Acero José Martí, con un avance del 85 % en las labores, según informaron ambos funcionarios durante la reunión.
“Estoy convencido de que la visita a Rusia impulsará el avance futuro de nuestros proyectos conjuntos de gran envergadura en áreas clave, especialmente en energía, transporte, industria y agricultura”, afirmó el viceprimer ministro ruso, tal como se cita en un comunicado del Gobierno de Rusia por la agencia EFE sobre el encuentro con Cabrisas.
Borísov también comentó sobre la finalización de la primera etapa del suministro de trenes y equipamiento ferroviario a Cuba. Además, reveló que “se está negociando el suministro de trigo en términos comerciales”, añadió el viceprimer ministro ruso.
Durante su conversación, los representantes de ambos gobiernos prestaron especial atención a los proyectos conjuntos priorizados y el aumento del flujo turístico. El viceprimer ministro se refirió al “efecto bumerán de las sanciones antirrusas impuestas por EE. UU. y los países europeos” que ya se comienza a sentir en sus propias economías.
Hasta el año pasado, el turismo desde Moscú era uno de los principales en la isla caribeña, pero desde que empezó la invasión a Ucrania y se suspendieron los vuelos de Rusia a naciones como Cuba, esta situación ha cambiado drásticamente.
“El mundo atraviesa momentos muy difíciles; hay una reestructuración de todo el sistema global de relaciones internacionales”, indicó Borísov durante su discurso de bienvenida a la delegación cubana.
“Los problemas globales son cada vez más evidentes. En este contexto, valoramos altamente el apoyo del Gobierno de la isla, que condenó el avance de la OTAN hacia nuestras fronteras. Es un claro ejemplo de una asociación real y basada en los principios de la política exterior de La Habana”, concluyó Borísov.
