Foto: Archivo
Texto: Hugo León
Las críticas a la calidad del pan de la canasta básica en Cuba no cesan, y actualmente se suma la preocupación de que este producto pueda desaparecer temporalmente de las panaderías estatales debido a la escasez de harina en el país.
Durante el fin de semana, fuentes oficiales de la isla admitieron la inestabilidad en la producción de este insumo, indicando que la principal causa es la baja disponibilidad de harina.
Según lo que se ha reportado, Cuba cuenta a partir de hoy con suficientes reservas para 12 días de pan.
Esta información se conoció tras la llegada a puerto habanero de un barco procedente de Europa, que trajo consigo 21 mil toneladas de harina de trigo.
Desde el domingo, los molinos de La Habana comenzaron a procesar el trigo, con el objetivo de distribuir la harina a cada provincia lo más rápido posible.
Además, con el fin de garantizar cierta estabilidad en el suministro de esta materia prima en el oriente cubano, se espera la llegada de otro buque al puerto de Santiago de Cuba esta semana, con aproximadamente mil 200 toneladas de harina, como indicó el periodista Lázaro Manuel Alonso del Sistema Informativo de la Televisión Cubana.
De acuerdo a la citada fuente, Cuba ha contratado más envíos de trigo que se concretarán después del 12 de junio, lo cual debería asegurar la harina para el pan de la canasta básica durante el resto del mes.
No obstante, a pesar de los recientes arribos, la producción de pan se vio afectada en varios territorios del país el domingo y hoy lunes, aunque se espera que la situación mejore a partir de mañana con la distribución de la harina que se está procesando en las fábricas de La Habana.
Frente a la incertidumbre en torno a la harina, muchos usuarios en redes sociales se preguntaron cómo era posible que pequeños negocios privados y vendedores ambulantes tuvieran acceso a la harina para hacer pan y dulces, e incluso contaran con varias bolsas de pan recién horneado.
La situación en Cuba en relación a la harina ha sido tensa durante varios meses, lo que ha llevado a la adopción de alternativas, como la producción con harina de yuca o plátano, entre otras.